KI-KAZH

He aquí una tienda dedicada al bienestar de sus compañeros felinos y caninos. Caroline Cantin ha abierto en el centro de la ciudad una tienda insólita, repleta de productos de calidad que no se encuentran en las tiendas de animales convencionales. ¿Por qué insólita? Porque aquí, el respeto por los animales y su bienestar están en el centro de sus preocupaciones. Al entrar en la tienda, descubrimos en dos salas una cueva de Alí Babá llena de pequeñas maravillas, cada una de las cuales responde a las exigencias éticas de Caroline Cantin en materia de respeto a los animales. Nos encanta su ingenio, porque ha sabido dar sentido a su trabajo organizando colaboraciones con asociaciones locales de protección de los animales: la boutique no vende animales, sino que anima a adoptarlos a través de asociaciones. Además de una sonriente bienvenida, encontrarás accesorios de calidad para perros y gatos, comida apta para todos los perfiles y certificada como apta para el consumo humano (¡algunos productos están a granel!), sin transgénicos ni aditivos. Por supuesto, ninguno de los productos está testado en animales, y nos negamos a vender artículos que puedan dañar la integridad física o moral del animal. Y no nos olvidemos de la ropa para hacer frente al frío y la lluvia, como estos mackintoshes fabricados en Bretaña a partir de velas de barco recicladas. Si se siente coqueto, también encontrará productos de higiene (champús, lociones, antiparasitarios), e incluso ideas para regalar a los dueños (papelería, figuritas, vajillas, bisutería, calcetines...). Sin duda, este lugar es una auténtica delicia para nuestros fieles compañeros, ¡pero también para todos los amantes de los perros y los gatos!