Esta institución briochina existe desde 1936. La casa ha atravesado las épocas para convertirse en lo que hasta ahora es: una pastelería-salón de té con múltiples delicios y cuyo kouts amann, especialidad del chef, fue elegido mejor de Bretaña en 2016. La pastelería no es muy grande, pero podrás sentarte en una de las sillas para degustar una gastronomía con un buen té. El parqué en el suelo, los pequeños manteles y las tazas floridas plantan el decorado. Delante de tantos dulces - pasteles, pasteles, macarrones, helados caseros, uno no sabe qué elegir. Se ha elegido el Bora-Bora, una creación muy personal, ya que el chef Arnaud Troalic ha trabajado en Polinesia antes de volver a sus tierras. El pastel de manzana-pasión -una pasta arenosa, la crema de almendras, manzanas asadas y una crema chiloña-alfa- también ha tenido un gran éxito. Una bonita experiencia gustativa.
Kouign amann très décevant
Tropezienne bonne.
Je n'ai jamais eu l'occasion de goûter les pâtisseries ni le pain.
Des tarifs bas en viennoiseries, du choix, de bonne pâtisseries, du chocolat en veux tu en voila !
Une critique qui fait des vers sans en avoir l'avoir l'air.
Le fondant chocolat epate, ma fille Agathe.
Le pain au chocolat je vous le dis, a su combler l'appetit d'Annie.
Croûte de thé pour moi, c'est validé !
A très bientôt, bon boulot au fourneau !
La bûche « Trégor » était simplement exquise. Un grand merci à cette équipe pour son savoir-faire et ces belles créations.