Situado a dos pasos de los caballos, este bar renovado totalmente después de unos veinte años de cierre es una auténtica ventaja. Los amantes de las piedras antiguas estarán encantados de encontrar un antiguo horno banal del siglo XVIII, los jugadores se disputan una parte de dardos o futbolín. Para tomar café leyendo El Telegrama o refrescarse con una buena cerveza (Leffe, Hoegaarden…), el lugar es muy agradable. De vez en cuando se organizan noches de música electro o jazz, así como un buen cóctel. Mojito, caipiriña, espresso martini, gin fizz, spritz (mítico cóctel veneciano) están firmados por Arthur o Rico, ambos acólitos que hacen vivir este lugar. La terraza interior también es muy agradable.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre BAR LE COOL
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.




