BAUHAUS À BERLIN, DESSAU ET BERNAU

La Bauhaus es un movimiento artístico fundado en Weimar (Turingia) en 1919, bajo el impulso del urbanista y arquitecto Walter Gropius, que fue uno de los tres directores históricos de la escuela junto con Mies Van der Rohe y Hannes Meyer.

Los principios de este movimiento revolucionaron el mundo arquitectónico de su época, sentando las bases duraderas de una concepción moderna y práctica del arte, la arquitectura y el diseño. La idea era aspirar a una funcionalidad cada vez mayor, combinada con un sentido práctico desprovisto de todo adorno. Es un concepto muy alemán, si se conoce el carácter y la forma de pensar de nuestros vecinos y amigos del otro lado del Rin en muchos ámbitos, incluso hoy en día.

Además de la arquitectura, la escuela Bauhaus también tuvo una gran influencia en el diseño de las artes aplicadas. Y ha tenido un impacto duradero, ya que sus principios se han dejado sentir en el diseño contemporáneo durante décadas.

Fundada en Weimar en 1919, cuando acababa de proclamarse allí la República del mismo nombre, que insufló un soplo de esperanza a los artistas y a todo el país, la escuela tuvo que abandonar Turingia cuando los conservadores y luego la extrema derecha se hicieron con el control del parlamento regional. Encontró un nuevo hogar en Dessau, una ciudad industrial necesitada de viviendas y el lugar ideal para poner en práctica el genio conceptual de la Bauhaus. En 1932, el partido nazi cerró la escuela de Dessau, que se trasladó a Berlín, donde sólo sobrevivió un año. Los nazis la describieron como una escuela que enseñaba"artes degeneradas al servicio del bolchevismo". Muchos de sus representantes abandonaron Europa rumbo a Estados Unidos, donde pudieron ayudar a diseñar y construir los nuevos rascacielos.

A pesar de este peregrinaje de una ciudad a otra, la Bauhaus dejó una huella significativa en Alemania. Después de la guerra, incluso influyó en las nuevas escuelas de arquitectura de la RDA, antes de que el "realismo socialista" soviético se impusiera. Su patrimonio arquitectónico ha sobrevivido hasta nuestros días, y nuestros perspicaces ojos sólo pueden confirmar que el modernismo de la arquitectura de la Bauhaus es intemporal y asombroso.

Entre los muchos artistas que participaron en el movimiento se encuentran Vassily Kandinsky, Paul Klee, László Moholy-Nagy y Marcel Breuer.

La Bauhaus en Berlín

Aunque su estancia en la capital alemana fue breve, pues sólo duró un año (1932-1933) antes de que los nazis sellaran su destino, la Bauhaus dejó algunos ejemplos significativos de su genio a orillas del Spree.

El primero es la Casa Lemke (Oberseestraße 60), una villa con las formas geométricas y los tejados de cristal típicos del movimiento. Fue el último edificio de Mies Van der Rohe antes de exiliarse a Estados Unidos. Actualmente es una galería de arte.

La Funkhaus Berlin (Nalepastraße 18), que podría describirse como la casa de la radio, es famosa por haber albergado la emisora estatal de Alemania Oriental durante unos treinta años. Su acústica es excepcional, y hoy en día el majestuoso auditorio se utiliza para grandiosos conciertos. Visitas previa petición.

Por último, la Waldsiedlung Toms Hütte, edificio protegido, es una urbanización construida entre 1926 y 1932 en el barrio de Zehlendorf. Merece la pena visitar sus equilibradas y coloridas fachadas.

Por último, si está de visita en Berlín y quiere saber más sobre la Bauhaus, no deje de visitar el Museo de la Bauhaus, ubicado en los archivos cercanos a la estación Ernst-Reuter-Platz (consulte nuestra sección dedicada).

La Bauhaus en Dessau

Tras abandonar Weimar, donde había sido fundada, la escuela Bauhaus encontró en Dessau un entorno fértil y tolerante en el que desarrollar sus ideas. El movimiento perduró aquí de 1925 a 1932.

Se construyó un edificio para albergar la escuela, financiado por el municipio. Aunque fue parcialmente destruido durante la Segunda Guerra Mundial, ha sobrevivido hasta nuestros días y es Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO (Gropiusallee 38). Su estética general es llamativa, con sus alas formadas por cubos asimétricos. Se habilitaron alojamientos para estudiantes, talleres y aulas de enseñanza. Es sin duda uno de los edificios más evocadores del movimiento en Alemania.

A finales de 2019 se inauguró un flamante museo que exhibe casi 50.000 piezas, lo que la convierte en la segunda colección más grande del mundo (Mies-Van-der-Rohe Platz 1).

Por último, es imprescindible visitar lasMeisterhäuser(casas de los maestros). Se encuentran a pocos minutos del edificio de la Bauhaus, en un bosque de pinos. En ellas vivieron los maestros y profesores del movimiento. Tres villas escaparon a los bombardeos aliados: la de Lyonel Feininger y László Moholy-Nagy, la de Georg Muche y Oskar Schlemmer y la de Vassily Kandinsky y Paul Klee.

Los entusiastas querrán llegar hasta el barrio de Törten o ciudad jardín, una prueba a escala real de la ideología de la Bauhaus creada por Walter Gropius. Todo contribuye a crear un efecto sorprendente.

La Bauhaus en Bernau

A tiro de piedra del centro de Berlín, la pequeña localidad de Bernau alberga un importante edificio de la Bauhaus. Diseñada por Hannes Meyer, la Bundeschule ha permanecido inalterada desde su creación. Masivo, funcional, característico de la Bauhaus. Visitas todos los domingos previa concertación.