Guía de viaje Durham

Durham es uno de los eslabones del Triángulo Universitario, sede de la famosa Universidad de Duke, clasificada entre las 10 mejores universidades del país. La universidad es el centro económico de Durham y emplea a casi 35.000 personas. Una población diversa e internacional que hace de Durham una ciudad cosmopolita y dinámica. Originalmente, la zona estaba poblada por indios relacionados con los sioux: las tribus Eno y Occaneechi. Durante el período colonial, los recién llegados europeos desarrollaron la cultura de las plantaciones, donde trabajaba una mano de obra esclava (lo que aún hoy explica la importancia de la población afroamericana, que representa más del 50% de la población de la ciudad). El tabaco fue el principal cultivo, y fue sobre este producto, después de la Guerra Civil y la reconstrucción, que la ciudad construyó su riqueza, y esto hasta el día de hoy. La historia de Durham es inseparable de la de la familia Duke, que construyó algunas de las primeras casas y granjas de tabaco de la ciudad (el sitio de Duke Homestead es accesible a los visitantes) antes de crear el mayor monopolio nacional de cigarrillos con la creación de American Tobacco, que reunió a las mayores marcas, entre ellas Lucky Strike. Posteriormente, la familia financió la construcción del campus universitario y del hospital al que dieron nombre y, con la disminución del consumo de tabaco, invirtió en nuevos sectores como la red eléctrica y la industria textil. Cuando el mercado del tabaco se derrumbó, Durham experimentó un período de crisis económica en el que el desempleo y la inseguridad reinaron durante un tiempo. El centro de la ciudad se vació y muchos barrios quedaron en ruinas. Es a través de la investigación y la salud que la ciudad es capaz de encontrar una nueva oportunidad de vida. Es sorprendente, cuando hablamos con los lugareños, darse cuenta de que hace poco más de 5 años, el centro de la ciudad era completamente diferente, casi abandonado y que la ciudad apenas había renacido de sus cenizas. Hoy en día, Durham ofrece una dinámica escena cultural con el teatro DPAC, y festivales de renombre como el American Dance Festival (julio) o el North Carolina Gay + Lesbian Film Festival (agosto), entre otros eventos que tienen lugar durante todo el año. También es un referente gastronómico con una cocina internacional y direcciones muy populares. La Universidad de Duke está en el corazón de la vitalidad de la ciudad y el magnífico campus es una parte esencial de una visita a Durham. Otro centro de excelencia es el hospital, que le dio a Durham el apodo de Medicine City. Pero para apreciar Durham, hay que entender que la ciudad no está organizada en torno a un centro urbano convencional, sino que incluye diferentes barrios, cada uno con su propia identidad. Los antiguos edificios industriales son parte integrante de la arquitectura de la ciudad, con un magnífico esfuerzo de rehabilitación realizado en los últimos años. Las antiguas fábricas de tabaco albergan ahora bares, restaurantes y tiendas de moda; el American Tobacco Campus y Brightleaf son el ejemplo perfecto de estos proyectos de rehabilitación. El que mejor conocemos como Bull City (el toro es el emblema de la ciudad), apodo que proviene de la antigua empresa tabacalera Bull Durham Smoking Tobacco, no le ha dado la espalda a su pasado industrial y lo ha convertido en uno de los destinos más populares en los rankings de ciudades donde la vida es buena en Estados Unidos.