Diversión y salidas San Miguel Bts Allende

Inaugurado en 1873 por la soprano Ángela Peralta, el "ruiseñor mexicano", este teatro es una joya arquitectónica iniciada en 1871 bajo la égida del arquitecto Juan Mañón. A lo largo de los años, ha acogido zarzuelas, operetas, circos e incluso combates de boxeo, antes de convertirse en cine. Su fachada actual, de estilo porfiriano, data de 1915. Hoy en día, este histórico recinto acoge diversos eventos: obras de teatro, espectáculos de danza, conciertos, talleres infantiles, conferencias y festivales como el Internacional de Jazz y Blues y el Cervantino.

Cuando pase por Lavanda, no se sorprenda de ver una cola deaficionados al café a todas horas. Su selección de cafés, procedentes de Chiapas, Oaxaca y Guerrero, es sin duda una de las mejores de la ciudad. Su carta también ofrece sabrosos desayunos, con delicias como las tostadas francesas con crema de queso, higos y nueces, o la suculenta cazuela de patatas asadas con champiñones, queso, huevo frito y bacon. Nuestro favorito.

Discoteca en forma de «arena»: las mesas están dispuestas alrededor de la pista de baile. Más común que el Grito pero eficaz: los balcones permiten a las dulzadas lanzar pequeños pedazos de papel a los que están en la pista para llamarlos.

Cuando atraviesas las robustas puertas de madera de esta cantina tradicional, no sólo entras en un restaurante, sino también en el rico pasado de San Miguel. Fundada en 1920, su verdadera transformación llegó en 1945 bajo los auspicios de un matrimonio vanguardista. A pesar de las convenciones que prohibían la presencia de mujeres en estos espacios, la intrépida Doña Manuela reinaba en el local y ofrecía una bebida de ajenjo inconfundible. Del taco de pescado al pastor al carpaccio de pulpo, sin olvidar las tostadas de marisco, cada plato es un canto a las delicias del mar.