POUSADA GREEN PLACE
Cómo llegar y contactar
Alojamiento y desayuno con terraza, piscina y hermosas vistas, con vistas al valle, cerca del pueblo de Coculi.
Con vistas al valle y cerca del pueblo de Coculi, esta pousada rodeada de verde está perfectamente integrada en el paisaje. Desde las terrazas y también desde las habitaciones, ofrece unas vistas impresionantes. En la piscina se sentirá tan a gusto, que deberá luchar para salir de ella. Pero sería una pena no aprovechar la proximidad de Coculi. Para ello, deberá bajar de la montaña y pasar junto a un pequeño cementerio hasta llegar al pueblo, que cuenta con una iglesia antigua. El personal es muy competente y se desvive para que disfrute de una estancia memorable.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Los puntos fuertes de este establecimiento:
Para más información
Información y horarios en POUSADA GREEN PLACE
Habitación doble: unos 50 €. Wifi.
Mensaje del propietario
El
albergue está situado en la zona de Coculi. Esta zona se beneficia del impacto de las brisas marinas del norte y noreste que le confieren un clima suave, apto para asentamientos humanos y actividades agro-turísticas-hoteleras, con una panorámica natural de la cordillera de Corda NNE, con una relativa llanura de los alrededores del pueblo de Coculi, y otras zonas ecológicas periféricas SSW, respectivamente.
Nuestras ofertas y servicios
Opiniones de los miembros sobre POUSADA GREEN PLACE
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
le personnel est très agréable et souriant est serviable.
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Le restaurant est particulièrement cher pour une qualité médiocre : environ 30 € pour trois plats peu généreux, répétitifs et sans saveur. Aucune bouteille d’eau n’est proposée à notre arrivée dans la chambre, et il faut impérativement en acheter sur place, à des prix excessifs. Et si vous souhaitez vous en procurer à l’extérieur, il faut marcher longtemps, car les commerces sont éloignés. Par ailleurs, il est interdit de ramener de la nourriture ou des boissons de l’extérieur, ce qui est vraiment contraignant au vu des prix pratiqués sur place.
Les chambres sont petites, et ma mère a été piquée à plusieurs reprises sur sont lit , probablement par des insectes, ce qui lui a causé de nombreux boutons.
L’ambiance générale est inexistante : aucune musique, aucune animation, ce qui est regrettable pour un lieu censé être familial. Enfin, le gérant ne fournit aucune information utile sur les activités ou sites à visiter aux alentours ; il se contente de recommander des chauffeurs, ce qui donne une impression d’improvisation totale.