RANDONNEES

En Trouville no sólo hay mar, también hay tierra, y es rica. El "Paseo de la Naturaleza Contada", entre el mar y el campo, le llevará por caminos muy queridos por Marcel Proust, en los que se encontrará, entre otras cosas, con la iglesia de Hennequeville, el Semáforo, y podrá conocer a los apicultores locales. Lleve buen calzado y un picnic, ya que la caminata es de 9 kilómetros. También es posible realizar otras caminatas, en las alturas de Trouville, donde tendrá una vista impresionante del mar. Toda la información en la oficina de turismo.