MUSEO DE LOS INOCENTES

Fundado en 1419 para cuidar y criar a niños huérfanos y abandonados, este hospital fue fundado durante la República por ricos empresarios del gremio de la lana. Diseñado por Brunelleschi, fue un proyecto ambicioso para su época, que encarnaba los valores del Renacimiento y el humanismo. Un lugar especial en la historia de Florencia. Primera institución de este tipo en Europa, es hoy un ejemplo de arquitectura armoniosa y racional, concebida para el cuidado y el descanso.

En el lado izquierdo del pórtico, en la Piazza della Santissima Annunziata, hay una inscripción en la pequeña ventana cerrada, adornada con dos pequeños amores. Hace referencia a la llamada "rueda" que funcionó hasta 1875, donde las madres abandonaban a los recién nacidos no deseados o a los niños que no podían criar. Aún hoy, el nombre de los Inocentes, en todos los sentidos, hace referencia a este origen. Desde el bonito vestíbulo central, se accede a la logia por encima del pórtico (antaño sala de estar de los niños). Entre las arcadas hay medallones de cerámica de Luca della Robbia, que representan niños envueltos en pañales: el símbolo del hospital.

ElMuseo de los Inocentes (museo degli Innocenti, también conocido como MUDI), que reabrió sus puertas en 2016 tras extensas obras de renovación, presenta obras de arte adquiridas a lo largo de los siglos mediante legados y donaciones, aunque la mayoría de ellas se dispersaron durante el siglo ^XIX. Las obras restantes, como las de Luca della Robbia, Sandro Botticelli y Piero di Cosimo, son dignas de un museo de este tipo. También podemos admirar la hermosa Adoración de los pastores de Domenico Ghirlandaio, maestro de Miguel Ángel (1488), en la que el artista ha representado, como era su costumbre, una serie de retratos históricos entre la multitud que rodea a los niños, como mercaderes del Arte della Seta, niños de la sala y benefactores del hospital. Pero más allá de sus obras de arte, este museo destaca por su conmovedor acercamiento a la historia de este orfanato, en particular a través de los conmovedores testimonios de niños abandonados, o de objetos dejados por los padres cuando fueron abandonados, con la esperanza de reconocer a los niños más tarde. No es imposible derramar una lágrima...

Para reponerse de las emociones, el Museo de los Inocentes cuenta con una cafetería que ofrece unas vistas impresionantes de Florencia. Il Caffè del Verone está abierto a todos. Un panorama espectacular que no debe perderse durante su visita