STATUE DE SAINT GEORGES DE KRATOVO

Esta estatua reciente y no muy bella (Свети Георгиј Кратовски Споменик) rinde homenaje a un santo local mucho menos conocido que la Madre Teresa o San Clemente de Ohrid. Se trata de Jorge de Kratovo, orfebre de la ciudad quemada viva por los otomanos en 1515, en Sofía, por negarse a convertirse al Islam. Los ortodoxos macedonios, serbios y búlgaros lo celebran el 11 de febrero y el 26 de mayo. Una iglesia erigida en 1925 lleva su nombre, cerca del puente moderno, al oeste del centro de la ciudad.