Información práctica : Tomar un descanso Génova
Horarios
Las cafeterías suelen abrir de 7.00 a 21.00, aunque los establecimientos de las localidades costeras cierran más tarde, sobre todo en verano, cuando pueden permanecer abiertos hasta medianoche o más tarde. Las heladerías abren de 11 de la mañana a 11 de la noche o medianoche, según la temporada. En Italia, cualquier hora del día es buena para darse un capricho en un bar o un café. Como a muchos italianos, a los genoveses les gusta desayunar en el mostrador entre las 7 y las 9 de la mañana, pero también hacer una parada a media mañana para tomar un espresso. Lo mismo ocurre después de comer y durante toda la tarde, tanto en la ciudad como en la playa. Por la noche, el ballet de aperitivi comienza en torno a las 18.30 h y se prolonga hasta las 21 h.
Baratos / Chollos
Un café en la barra cuesta entre 1,10 y 1,50 euros, y un capuchino entre 1,30 y 2 euros. Los precios suben rápidamente si decides sentarte. Una naranja exprimida cuesta entre 4 y 7 euros, y una botella pequeña de agua, entre 1 y 1,50 euros. Un aperitivo le costará entre 7 y 15 euros, siempre acompañado de abundantes aperitivos. Algunos locales ofrecen auténticos buffets por el precio de un cóctel, y muchos lo convierten en su cena. Un buen helado de dos sabores cuesta entre 2,50 y 4,50 euros.
A partir de qué edad
Italia es uno de los pocos países donde la normativa no prohíbe la venta de alcohol a menores. Sólo una ley prohíbe administrar bebidas alcohólicas a menores de 16 años. Así que cada uno a lo suyo, ¡beba con moderación!
Muy local
Puede que Génova compita con Turín y Milán por la paternidad delaperitivo, pero sin duda es en Génova donde este ritual social tiene más sabor a fiesta que en ningún otro lugar. Al final del día, muchos establecimientos costeros se transforman en bares frente al mar, ofreciendo un marco idílico para saborear un cóctel frente al mar. Se pueden pedir los populares spritz y mojito, pero a los lugareños también les gusta saborear vasos fríos de pigato o vermentino, el vino blanco local.
En cuanto llega el buen tiempo, las heladerías están en pleno apogeo, tanto a la hora de la merienda como después de cenar, ofreciendo la posibilidad de elegir entre cono o coppetta de dos sabores (el precio no depende del número de sabores, sino del tamaño del helado).
Niños
Todos los cafés ofrecen brioches y pizzetas que a los más pequeños les encanta picar para desayunar o merendar. Y entre las numerosas heladerías de la ciudad y junto al mar, los niños se divertirán encontrando su sabor favorito.
Fumadores
En Italia está prohibido fumar en bares y cafeterías, pero sí en la terraza.
Atrapa turistas
Al igual que con los restaurantes, cuidado con los cafés turísticos de precios desorbitados, cuyas bebidas pueden ser muy decepcionantes. Hay muchos por Portofino y la Riviera delle Palme.