Restaurante que ofrece un buffet libre de platos y postres asiáticos, especialmente chinos.
Sí Asian Wok parece un restaurante de cadena y sí se alza en el corazón de una zona de actividades totalmente desprovista de encanto, perdido entre numerosos restaurantes de cadena. Y sí su aparcamiento es demasiado pequeño y la mayoría de los tiempos de descanso. Pero, por cierto, es una buena señal, si se dispugna el lugar. Vamos a entrar. Un servidor nos acoge con amabilidad y nos instalamos en una mesa explicándonos el funcionamiento del lugar. Bufé de entrantes, platos asiáticos -sobre todo chinos- y postres a voluntad. Y luego, en el fondo a la izquierda, el inmenso mostrador donde el chef oficie con sus grandes sartén huecas. Elegimos sus ingredientes crudos y hop, en el wok, no en cualquier orden y no importa cómo, se ha podido comprobar. Una cocción de las más sanas, una salsa, si lo deseas, se toca. Es delicioso, roborativo y ligero al mismo tiempo, por un precio absolutamente irrisorio al mediodía. El establecimiento ha evitado el escollo de las manchas en la elección del decorado, se le agradece, y ha tenido la buena idea de acompañar su café de un pequeño castillo. ¡Brillante!
De plus il suffit d'etre assis le long des fenetres pour passé une soirée vraiment au frais.
Nous n'y retournerons pas.