MUSEO DALMA

Muhammad Bin Jasim al Muraykhi, un acaudalado comerciante de perlas, construyó esta imponente tienda en forma de fortaleza en 1931, sin saber que el desarrollo de las perlas cultivadas por los japoneses (1907) supondría el fin del nácar natural. Situada ahora en el centro de una rotonda de carretera, cerca del puerto pesquero y del motel, la Casa Muraykhi debe su bonito brillo rosado al coral y las conchas que se mezclan con las rocas marinas utilizadas en su construcción. La planta baja se utilizaba como almacén de perlas, mientras el propietario recibía a sus invitados y amigos en el piso superior. Vea una prensa de fecha restaurada en el edificio contiguo. La casa alberga un museo de artes y tradiciones populares, dedicado a la perla. Mientras pasea, apreciará la valentía de los pescadores, que sólo disponían del equipo más básico: tirantes de cuero, anclas de piedra y redes. Véase también cuchillos, cerámica, ánforas y teteras. En la primera planta se accede a la sala de recepción del dueño de la casa, donde reina el esqueleto de una pequeña cría de ballena. Un guardia le mostrará el libro de visitas. Lamentar la ausencia de verdaderos tesoros históricos procedentes de las excavaciones arqueológicas, algunos de los cuales se presentan en el museo nacional de Al Ain. Queda mucho trabajo por hacer para recuperar la densidad patrimonial de la gran barrera de perlas. El director del museo, Fathy Mohammed Abdullah, es también arqueólogo y guía en su tiempo libre, así que no dude en preguntar por él en la entrada.