MUROS DE LA CIUDAD
Las murallas son sin duda el primer edificio que visitar en el viejo Dubrovnik. Construidos entre los siglos VIII y XVI, los muros de recinto protegieron la ciudad durante cientos de años. Rodean la totalidad del casco antiguo con sus 1940 m de largo. La obra es impresionante: las paredes, increíblemente conservadas, pueden llegar a 25 m de altura y hasta 6 m de espesor. Las paredes de la ciudad tienen una parte interior y una parte exterior. La primera forma forma un recinto más pequeño con diez bastiones semicirculares construidos por el famoso arquitecto florentino Michelozzo Michelozzi. La segunda parte tiene cinco bastiones, tres torres circulares y doce torres cuadradas o rectangulares, así como una enorme fortaleza, el fuerte Sveti Ivan (Saint Jean) en el puerto. Desde lo alto de las murallas, tendrás unas vistas impresionantes al casco antiguo.
Nous avons fait cette visite en septembre. Pas autant de monde qu'en plein mois d'été mais bien penser à prendre casquettes lunettes de soleil et crème solaire car le soleil est bien présent et ça chauffe d'autant plus tout en haut des remparts.