PRAÇA MAUÁ

En la enorme obra de reurbanización del centro de Río, la cesión de la plaza Mauà es todo un símbolo de la política de "marketing urbano" de las metrópolis de los países emergentes. La plaza Mauá tiene una larga historia, interesante para entender la evolución urbana de Río. La estatua del Barón Mauá (pionero industrial brasileño), creada por el escultor Rodolpho Bernardelli e inaugurada en 1910 en el centro de la plaza, no debe dar crédito a sus ojos. Las transformaciones del último siglo han sido espectaculares. Bautizada como Playa de Nuestra Señora y luego Largo da Prainha cuando se creó la ciudad, el lugar era inicialmente apto para el baño, a tiro de piedra del Monasterio São Bento en la colina. Un entorno bucólico que se urbanizó muy rápidamente, sobre todo en 1914, al convertirse en el puerto de desembarco de los barcos que llegaban del Viejo Continente y de otros países latinoamericanos. Lugar dudoso por la noche, la Praça Mauá estuvo repleta de bares, salas de conciertos y burdeles para los marineros de paso a lo largo del siglo XX y poco frecuentada por la noche. Fue el centro de un proyecto de rehabilitación de la zona portuaria en el corazón de la ciudad, en Porto Maravilha, y ahora es muy popular entre los turistas y los cariocas. Las letras gigantes "Cidade Olimpica" se han colocado en esta nueva explanada, bordeada de numerosas palmeras a menudo golpeadas por el viento. La gente viene aquí para hacer fotos entre dos visitas al SAM y al Museo do Amanhã, o simplemente para pasar un buen rato con la familia.