MONASTERIO APOSTÓLICO VARNAVAS
Este monasterio alberga la tumba de San Bernabé, natural de Salamina, así como dos museos (iconos y objetos arqueológicos).
Fundado hacia el año 477, el monasterio ortodoxo griego del Apóstol Bernabé (Aziz Barnabas Manastırı, Μονή του Αποστόλου Βαρνάβα/Moni tou Apostolou Varnava) era uno de los lugares sagrados más importantes de Chipre antes de la invasión de 1974. Ocupado por monjes hasta 1976, alberga la tumba de San Bernabé y, desde 1991, dos museos. Nacido a principios del siglo I, Iosis Bernabé, conocido como Bernabé, pertenecía a la comunidad judía de Salamina de Chipre. Ocupa un lugar importante en los Hechos de los Apóstoles: fue a Palestina y se convirtió en uno de los compañeros de Cristo, por lo que lleva el título de apóstol, aunque no era uno de los doce apóstoles "oficiales". De regreso a su ciudad natal en el año 60 d.C., dirigió la primera evangelización de Chipre, antes de morir mártir, probablemente ahorcado por los judíos de Salamina.
Tumba, museos y cafetería. Redescubierta hacia 477, la tumba de San Bernabé sirvió para justificar la autocefalia (independencia) de la Iglesia de Chipre, reconocida por el Imperio romano/bizantino en 478. Se encuentra a 70 m al este del aparcamiento, bajo una capilla de 1950. Muy sencillo, sigue siendo un lugar de peregrinación. Pero está vacío: las reliquias se conservan en la iglesia de Osion Varnavas kai Ilarionas, en el pueblo de Peristerona, a 30 km al oeste de Nicosia-Sur. El complejo fue fundado por el emperador bizantino Zenón y ha sufrido numerosas modificaciones. Dañado por las incursiones árabes en el siglo VII, fue sede del obispado de Constantia/Salamine hasta el siglo XVI. La iglesia principal data de 1750. En su interior se conserva el iconostasio de madera del siglo XIX. Sin embargo, las paredes se encalaron después de 1976. Aquí se guardan -ilegalmente- iconos de otras iglesias de la región. Estas obras son de escaso interés (las más preciosas han sido robadas). El más antiguo es una representación de San Juan Bautista de 1760, y muchos de los iconos de San Bernabé datan de los años sesenta. Destaca, sin embargo, la Decolación de San Juan Bautista (1858), en la que el verdugo aparece representado como un soldado otomano. Dos edificios contiguos se han convertido en museo arqueológico. Las colecciones son bastante ricas, pero sin demasiadas explicaciones. Abarcan un amplio periodo que va del Neolítico a la Edad Media. Destacan estos juguetes del periodo Arcaico (750-600 a.C.): bonitas figuritas de terracota de jinetes y caballos montados sobre ruedas. Por último, el patio alberga un pequeño y agradable café-restaurante.