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Hotel muy bonito, con un personal muy simpático y atento, sólo fui a descansar y no pude disfrutar mucho de sus instalaciones pero dormir dormí perfectamente
Hace años que mis hermanos ambos se casaron allí, muchos, ahora disfruto dea Cafeteria del Hospital Centro de Andalucía, inmejorable trato por todo el personal, comida exquisita y variada, un éxito en mi modesta opinión.
Siempre que venimos a Montilla, nos quedamos en este hotel. EL servicio y a atención del personal es maravillosa y la cocina solo os puedo decir que el rabo de toro, las alcachofas al Montilla y el surtido de marisco que fue lo que en esta ocasión tomamos estaba para mojar pan... nosotros lo tenemos claro. Aunque hay que coger el coche para ir al pueblo...2 minutos no es problema para nosotros.
me dan habitación 114, no tiene ventana, pido que me cambien, me dicen que no tienen, después me confirman que si habían más habitaciones. doble tomadura de pelo y falta de respeto
ver foto del ventanuco, válido para palomas o presos.
Mi reserva es en referencia a la cafetería del hospital de Andalucia en Lucena. Comida buena y casera, buen precio y el trato al cliente excente. Muy recomendable para comer si estás en Lucena.
Excelente hotel , muy limpio , muy buena comida y muy variada, el personal muy agradable y atentos . No podéis ir sin probar su famosa leche frita , buenisima.
Celebramos una boda familiar el pasado viernes, fue todo un éxito, su personal estuvo súper atento a todo.
Muchas gracias por hacer un dia único, la amabilidad y profesionalidad de los trabajadores fue impecable y estaron en todo detalle para que saliese genial.
La comida estaba espectacular y el sitio es precioso.
En cuanto a las habitaciones, nos quedamos algunos familiares, destacar su limpieza, amplitud y la atencion en recepción 24h.
Hotel très bien et personnel très aimable.
La chambre etait grande et propre
Petit default dans la salle de bain la vitre de la baignoire est un peu noir et les joints aussi .
Le repas du soir est un peu cher pour la qualité proposé 60 euros a 2 et ce qui est indiqué n est pas toujours disponible. Dans la chambre il etait annoncé cena a 9.90 peut etre un menu ou autre qui ne nous a pas ete proposé.
Le petit dejeuner est pas tres garni mais a priori peu de client le jour ou nous y etions.
Pour la chambre et la gentillesse du personnel je retournerai dans cet hotel mais je prendrais surement mes repas ailleurs.
Estuvimos en el RESTAURANTE. no en el hotel. Era tarde para almolzar y tuvieron la amabilidad de atendernos. Pedimos dos sopas castellanas que estaban realmente ricas, Alcachofas a la montillana y cardos con almejas, todo de temporada y buenisimo, para terminar una leche frita buenisima, flambeada con licor. Nos encanto todo, El personal muy profesional, rápido y agradables. Sin duda recomiendo.
Fenomensl todo; limpieza, atención del personal, tamaño habitación y cuarto de baño, calidad camas y supletoria.
Patio ideal para tomar algo, paz y tranquilidad.
Es un hotel que por su ubicación y comunicación por carretera resulta cómodo para hacer una parada, y está cerca de una población que cuenta con todos los servicios
Estancia del 4 al 8 diciembre 2023. Nos acompaña un perro de cuatro kilos como mascota, te cobran 7,50€ por día y te asignan una de las dos o tres peores habitaciones del edificio, a ras de tierra.
La 117 es minúscula, inhabitable por sus dos descomunales camas en semejante espacio, armario ínfimo, con marco pero sin puertas, de difícil acceso. La mesilla de noche a los pies de la cama… Incomprensible que asignen este cubículo como primera opción habiendo más disponibilidad.
Pedimos cambio de habitación y, perdonándote la vida Lola, admite que hay otra libre. La 118 está mucho mejor distribuida, pero con vistas al corral (ver fotos).
Si llevas perrete, te aguantas: abonas la tasa, pero te sientes preventivamente discriminado sin causa ni compensación. Se declaran “pet friendly” y echan la culpa al animalito por los daños que pudiera ocasionar. Señores: son los amos, no los animales los responsables de los malos usos.
Por lo demás, es buen hotel de carretera, histórico en la campiña cordobesa, con buena oferta gastronómica y sobresaliente finca; pero indebidamente dirigido para el grueso presupuesto económico con que seguro cuenta.
Falta personal en los desayunos —que se podrían organizar mucho mejor—, se esfuerza lo indecible el joven, apuesto y único profesional, hombre-orquesta de barra y sala, pero casi no da abasto mientras superiores o compañero/as suyos se pasean por allí sin inmutarse ni recoger un plato.
El cúmulo de reseñas desfavorables parece una venganza familiar con este negocio que, hechas las observaciones anteriores, responde perfectamente a su categoría, y más que podrían potencialmente conseguir.
En resumen: no es aconsejable ir con mascotas y gerencia/dirección del complejo muy mejorable, especialmente del mantenimiento, orden y limpieza general de las cosas a la vista.
Magnífico hotel. Hemos estado allí en una excursión de unas 60 personas. Las habitaciones amplias, camas cómodas y todo muy limpio!. Las comidas y cenas muy buenas, buena cantidad y de muy buen sabor, y el servicio inmejorable.
La ubicación un poco apartada de Montilla, pero bueno. General, todo súper bien. Le soy 5 estrellas y más si hubiera.
El arroz con bogavante está brutal.
ver foto del ventanuco, válido para palomas o presos.
Muchas gracias por hacer un dia único, la amabilidad y profesionalidad de los trabajadores fue impecable y estaron en todo detalle para que saliese genial.
La comida estaba espectacular y el sitio es precioso.
En cuanto a las habitaciones, nos quedamos algunos familiares, destacar su limpieza, amplitud y la atencion en recepción 24h.
La chambre etait grande et propre
Petit default dans la salle de bain la vitre de la baignoire est un peu noir et les joints aussi .
Le repas du soir est un peu cher pour la qualité proposé 60 euros a 2 et ce qui est indiqué n est pas toujours disponible. Dans la chambre il etait annoncé cena a 9.90 peut etre un menu ou autre qui ne nous a pas ete proposé.
Le petit dejeuner est pas tres garni mais a priori peu de client le jour ou nous y etions.
Pour la chambre et la gentillesse du personnel je retournerai dans cet hotel mais je prendrais surement mes repas ailleurs.
Patio ideal para tomar algo, paz y tranquilidad.
La 117 es minúscula, inhabitable por sus dos descomunales camas en semejante espacio, armario ínfimo, con marco pero sin puertas, de difícil acceso. La mesilla de noche a los pies de la cama… Incomprensible que asignen este cubículo como primera opción habiendo más disponibilidad.
Pedimos cambio de habitación y, perdonándote la vida Lola, admite que hay otra libre. La 118 está mucho mejor distribuida, pero con vistas al corral (ver fotos).
Si llevas perrete, te aguantas: abonas la tasa, pero te sientes preventivamente discriminado sin causa ni compensación. Se declaran “pet friendly” y echan la culpa al animalito por los daños que pudiera ocasionar. Señores: son los amos, no los animales los responsables de los malos usos.
Por lo demás, es buen hotel de carretera, histórico en la campiña cordobesa, con buena oferta gastronómica y sobresaliente finca; pero indebidamente dirigido para el grueso presupuesto económico con que seguro cuenta.
Falta personal en los desayunos —que se podrían organizar mucho mejor—, se esfuerza lo indecible el joven, apuesto y único profesional, hombre-orquesta de barra y sala, pero casi no da abasto mientras superiores o compañero/as suyos se pasean por allí sin inmutarse ni recoger un plato.
El cúmulo de reseñas desfavorables parece una venganza familiar con este negocio que, hechas las observaciones anteriores, responde perfectamente a su categoría, y más que podrían potencialmente conseguir.
En resumen: no es aconsejable ir con mascotas y gerencia/dirección del complejo muy mejorable, especialmente del mantenimiento, orden y limpieza general de las cosas a la vista.
La ubicación un poco apartada de Montilla, pero bueno. General, todo súper bien. Le soy 5 estrellas y más si hubiera.