HOTEL MACIÀ DOÑANA * * * *
Hotel con terraza situado cerca del estuario del Guadalquivir y de las playas de Sanlúcar ofrece amplias habitaciones
En el típico barrio de Bajo de Guía, a un paso de la desembocadura del Guadalquivir y de las playas de Sanlúcar, el Maciá Doñana, de arquitectura moderna, cuenta con varias ventajas, como una gran piscina y solarium, un equipo de recepción amable y competente y una ubicación privilegiada. Las 96 habitaciones (con aire acondicionado, baño completo, etc.) son tan confortables como las de cualquier hotel de 4 estrellas en España, y las terrazas son casi todas igual de amplias. Desde el vestíbulo se accede a la sala de desayunos y al restaurante. El menú incluye un completo buffet por la mañana, cocina tradicional andaluza y platos combinados a la hora de comer. En definitiva, un clásico en esta encantadora localidad costera para parejas, grupos y familias..
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre HOTEL MACIÀ DOÑANA
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
Hago esta reseña, porque he estado con un grupo de amigos el pasado fin de semana, y he descubierto algo que en mis anteriores viajes no había utilizado. Me refiero a la cafetería/terraza interior, junto a la piscina.
El servicio a la altura del resto del Hotel, pero quiero resaltar el trato que hemos recibido de Juan Manuel, un camarero de la cafetería, que se ve que le gusta lo que hace y eso, es de agradecer.
Muchas gracias Juan Manuel, principalmente por tu profesionalidad !!!.
Hotel muy recomendable.
Buena ubicación, a dos pasos de la playa y un agradable paseo marítimo y a unos 15 minutos andando del centro.
Hemos ido en octubre y el hotel estaba tranquilo, las zonas comunes bien cuidadas, limpias y las recepcionistas muy simpáticas.
La habitación amplia, con buenas vistas, como se puede observar en el vídeo.
Nos pusieron una botella de Manzanilla como detalle de bienvenida y dos botellitas de agua en el minibar. También una cuna gratuita bajo petición. La cama, si bien no era muy grande, cómoda.
Le resto una estrella a la habitación porque faltaría insonorizarla para no escuchar a los huéspedes de las habitaciones colindantes.
El desayuno muy bueno, sin abusar como en otros hoteles de este tipo, pero con suficiente variedad y calidad. Eso sí, el café malo como en la gran mayoría de los hoteles. Los camareros agradables y en general un ambiente tranquilo, que se agradece mucho.
En definitiva, un hotel recomendado al cual volveríamos si nos dejásemos caer de nuevo por ahí.