DRAGONFLY

Un auténtico restaurante vietnamita en perfecta armonía con su decoración zen. Los platos son preparados con cariño por el propietario. En la carta, platos vietnamitas (samoussas, nems, buñuelos de gambas, rollitos de primavera, cha gio, banh cuon, tom, pho...) por supuesto, pero también platos criollos revisitados. Todo es casero, por lo que la espera merece la pena, y se ve ampliamente recompensada cuando llegan las abundantes raciones. Buena relación calidad-precio y buena acogida. También hay platos para llevar.