Un restaurante sencillo que ofrece cocina tradicional en Villefranche-sur-Saône.
Al estilo del corcho de Lyon, no encontrará nada mejor en Villefranche. Una decoración típica, las fotos de la época que quieras, aquí estás, y colgado en una de ellas, el sombrero del abuelo. Un marco muy agradable para una muy buena cocina tradicional. El vino está bien escogido. Sin alboroto, pero sin descuidos. Y pruebe su famoso "césar", o déjese tentar por sus especialidades: huevo meurette, tarta de hígado de ave, patatas al vapor con salchichas calientes, callos al estilo de Lyon, delantal de zapador, youillette con chalote de vino blanco, quenelle de lucio con salsa Nantua.... Y los más gourmets no dudarán en terminar su comida con el plato gourmet que varía según el jefe o en elegir entre ensalada de frutas frescas, gratinado de frutas, crème brûlée, tarta de tatin, profiteroles de chocolate, suavidad de chocolate y corazón de caramelo, mousse de chocolate y mascarpone. En resumen, un lugar cálido donde se puede comer generosamente bien.
Le cadre et les produits sont de bonne qualité.
Sous prétexte de ne pas vouloir prendre la carte restaurant un samedi soir, le gérant nous a inventé une soit disant loi qui est passée pour se trouver des excuses.
Une expérience très moyenne.