El lugar puede parecer sorprendente. Este hotel no está situado en el corazón de una estación balnearia, sino al final de una pequeña carretera descentrada, un poco aislada de la parte más turística de Oléron. Su ubicación es ideal para cualquiera que desee tomar un descanso con Domino Beach como único vecino. La bienvenida es cálida, los propietarios le permitirán tener una estancia agradable dándole algunos consejos de visita. Cada una de las habitaciones se encuentra en la primera planta y tiene una terraza privada. Apreciamos la decoración relajante y el deseo de proteger el medio ambiente. En la planta baja hay un restaurante con una bonita habitación totalmente acristalada que ofrece un ambiente delicioso. Venimos a descubrir platos elaborados con productos locales y de temporada, el establecimiento tiene un vínculo privilegiado con los productores oleroneses. Por ejemplo, puede disfrutar de un foie gras de pato escalfado con Merlot, un tártaro de vieira con semillas de sésamo o un asado de rape con mantequilla de romero.
Félicitations au cuisinier ????, aux serveuses ????
On se sent bien dans ce restaurant au bord de mer ????