IBIS VIEUX-PORT

Este hotel destaca por su estilo arquitectónico único, una fachada sorprendente que no es más que la de la antigua iglesia de San Nicolás. Sin duda apreciarás la situación ideal para todos los que vienen a visitar La Rochelle: A 400 m de la estación de tren, en un lugar muy reformado y cerca de la calle de San Nicolás, una callejuela llena de encanto que le llevará a un paseo por el centro de la ciudad. Es posible detenerse delante del hotel para dejar el equipaje, pero el aparcamiento más cercano es de pago. Apenas entrada, te seducirá un vestíbulo soleado y un personal amable y atento. El acceso a las habitaciones dobles o comunicadas se realiza mediante un ascensor. El espacio está restringido pero bien organizado con un cuarto de baño limpio, una cama grande y numerosos armarios. Cabe señalar: la mesa, interesante para aquellos que quieran trabajar, así como la tranquilidad, la habitación que da a los tejados o a un patio. Este hotel no dispone de restaurante, pero podrás degustar algunos platos en el bar: quiche lorena, crumble salmón y puerros, lasaña gratinada en la boloñesa… Hay tres habitaciones disponibles para personas de movilidad reducida.