Un entorno elegante frecuentado por los jockeys y los entrenadores árabes. Se puede ver un guiño a esta clientela en las cabezas de caballos colgadas en las cocinas, separadas por el comedor por un gran cristal. Los platos son tan buenos como su presentación lo deja suponer: el semicocido de foie gras, chutney de higos y sus tejas de pan asado; el gratin de anacimlette con base de puerros, o bien LA profiolola de postre… El restaurante privilegia los productos frescos y se nota desde el primer toque. En cuanto a los alrededores, puedes disfrutar de una agradable terraza con buen tiempo. Este restaurante es un lugar que descubrir, aunque implica un pequeño esfuerzo pecuniario.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Opiniones de los miembros sobre L'OPEN HOUSE
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.
Restaurant très bien tenu et les mets sont très bons.
Rien à dire si ce n'est très bien.