L'ATELIER SAINT-MICHEL
Es aquí, en la fábrica situada no muy lejos de esta tienda, donde nació la famosa galette redonda, crujiente y dorada, ¡uno de los emblemas gastronómicos de la región! Debemos la historia de este mítico pastel a Joseph Grellier, el panadero que conservó la receta familiar. Se le rinde homenaje en esta tienda de 200 m², con salón de té y terraza. Se exponen galettes, palets Roudor y otros sablés de Retz, Michelettes. En el salón de té, acompañe su degustación con una magdalena o pastas más elaboradas. No es posible visitar la fábrica.
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Opiniones de los miembros sobre L'ATELIER SAINT-MICHEL
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Le personnel est parfois vite débordé donc attente longue dommage
Qu'il est agréable de sentir cette odeur de biscuité lorsque l'on passe sur la route bleue