LE GROS CAILLOU
Este megalito que se remonta al neolítico se implantó en una vía de comunicación importante en aquel momento. Además, el valle de la Senada es especialmente rico en megalas o piedras insólitas. Esta multiplicación no puede ser el fruto del azar. Se han emitido muchas hipótesis: ¿referencias astológicas? ¿Lugar de culto? ¿Sitio mortuario? ¡Para que funcione nuestra imaginación! Este menhir se eleva a 2,90 m sobre el suelo (y se hunde a más de 8 m según estimaciones) y destaca por un relieve particular de su estructura resultante de la erosión natural que da la impresión de que se le ha cortado en dos. Está clasificado en monumentos históricos desde 1981. Muchas rutas de senderismo, como el sendero de la Gran Collou, están cerca del sitio: la oportunidad de descubrir la campiña circundante, en la que este insólito menhir solitario atrae inevitablemente a los viajeros.