ELIANE TROJAN
Encantadora casita en un entorno rural ideal para pequeños presupuestos en Saint-Maurin.
Saint Maurin es un pueblecito encantador del fin del mundo que, por su aislamiento, cuesta retener a los viajeros demasiado apurados. El pequeño Fué ha crecido de nuevo hasta las fronteras del departamento para satisfacer su curiosidad. Desde la ciudad, el pueblo está aún impregnado por su belleza y sus antiguas piedras. No fue su sorpresa sorpresa descubrir una dirección donde alojarse en pleno corazón de la ciudad. A dos pasos de la abadía, Eliane Trojan le da la bienvenida en su encantadora casita. La decoración es, sin duda, un poco anticuada, pero se puede olvidarlo al escuchar a la amante del lugar contarte la historia del molino en el que vive y la de los numerosos viajes que ha realizado a lo largo de toda su vida. Las habitaciones están bien mantenidas. Único defecto: todas las habitaciones no tienen baño y los que no puedan acceder a este entorno rural sólo encontrarán la televisión en la gran habitación triple. Es ideal para los presupuestos reducidos que buscan autenticidad.