CUEVA DE PECH MERLE
Sumérjase en la historia de la humanidad en esta cueva, que contiene numerosas pinturas de hace más de 20.000 años
Lot tiene su Altamira: la cueva de Pech Merle, en el valle del Célé. Pero aquí se visita la auténtica cueva decorada con pinturas auténticas que datan de hace más de 20.000 años. Descrita por el abad Breuil como «la capilla Sixtina de Causses du Lot, uno de los monumentos más bellos del arte pictórico del Paleolítico», esta cueva fue descubierta en 1922 por tres adolescentes. Con casi 800 motivos identificados en la cavidad, Pech Merle es un lugar destacable de la prehistoria europea. A través de 800 metros de galerías y amplias estancias, descubrirá sucesivamente el friso negro (bisones y mamuts, caballos y bóvidos en siete metros de recorrido), la sala de los discos con curiosos detalles discoidales y sus huellas humanas en movimiento, el grabado de la cabeza de un oso, un mamut en relieve y después la galería del Oso. Por último, apreciará el famoso fresco de los Caballos Puntuados, rodeado de manos estarcidas. El Centro de la Prehistoria es también un museo recién renovado: cuenta con dos salas de exposición sobre la Prehistoria y el arte de Quercy, y proyectan un documental sobre el arte prehistórico.
Por razones de conservación de la cueva y de las pinturas, la visita se limita a setecientas personas al día. Por tanto, es muy aconsejable reservar.