SOBAC
Marcel Mézy tiene muchas facetas: la imaginación y la audacia de los inventores, el sentido común y el saber hacer de los agricultores de generación en generación. Desde hace más de treinta años, este criador de pura sangre árabe es un apasionado de la agricultura ecológica. Y utiliza sus tierras, que se extienden desde Montrozier hasta la meseta de Lévézou, para desarrollar productos capaces de devolver la vida a tierras agotadas por años de tratamiento químico. Fue a principios de los años ochenta, casi por casualidad, al empujar montones de compost uno encima del otro, cuando creó un proceso revolucionario, un acelerador de humus. Este fertilizante 100% natural está compuesto por doce tipos diferentes de plantas y hongos. Pero su formulación exacta sigue siendo un secreto celosamente guardado. Comercializado bajo el nombre de Bacteriosol para tratar el suelo, Bacteriolit para enriquecer el estiércol y Bacteriometha para mejorar la producción de energía de los metanizadores, este cóctel es utilizado actualmente por más de 5.000 agricultores en Francia y está certificado por Ecocert para la agricultura ecológica.