ESTACIÓN DE LIMOGES BÉNÉDICTINS
Estación benedictina de Limoges con vidrieras Art Déco y un campanario que domina una de las 7 colinas de la ciudad, monumento histórico
Inaugurado en 1929, este edificio monumental sustituyó a la anterior estación abierta en 1856, cuando llegó el primer tren. Es a la vez una proeza arquitectónica (fue la primera estación francesa que se construyó sobresaliendo de los andenes) y un testimonio de la prosperidad de Limoges en aquella época. Construida en estilo de entreguerras, esta verdadera catedral laica es a la vez grandiosa, excesiva y llena de poesía. Obra del arquitecto Roger Gonthier, se distingue por su campanario (67 metros de altura) que domina una de las siete colinas de Limoges, su cúpula de cobre, la riqueza de la ornamentación, las vidrieras de estilo Art Déco del maestro vidriero lemosín Francis Chigot y el inmenso espacio central, cuya bóveda se apoya en cuatro alegorías (Lemosín, Bretaña, Gascuña y Touraine). Tanto como la porcelana, la estación benedictina ha hecho famosa a Limoges en todo el mundo. En 2009, la revista estadounidense Newsweek la clasificó como la quinta estación más bonita del mundo También cabe destacar que está catalogado como monumento histórico desde 1875 y que ha recibido el título de patrimonio del siglo XX.
Este establecimiento también figura como :
Dommage de ne plus pouvoir y prendre un café, le buffet de la gare ayant définitivement fermé.
Un conseil : prenez quelques instants pour lever les yeux et admirer le plafond sculpté