Dirigido por una pareja joven y agradable, Guillaume y Laëtitia (Laëti para los habituales), este bar restaurante es un lugar de encuentro del barrio con ambiente popular. Bienvenida sincera, servicio sin florituras en la sala a la entrada entre el mostrador de madera donde se suspenden sugerencias sobre pizarra y televisión que retransmite información y partidos. Un plato del día sencillo y bien servido con dos verduras. Tarta fina de barrino con manzanas, castillos de riñones, escalope de aves de corral con crema, arroz y guisantes-zanahorias, cuadrado de cerdo tortas de patatas. En postre, crumble, luz, bávaro a los dos chocolates. Hay que destacar en el menú obrero completo la base de varios quesos sobre la mesa. En cuanto a los adeptos a la cabeza de ternera salsa picada, los jueves se llenan la panesa. El restaurante está abierto por la noche para los grupos con reserva, con posibilidad de un menú adecuado. Hay dos salas, una de ellas con aire acondicionado y videofaro para reuniones.