DELICE DES ANGES
Angelique y Gaëlle, dos chefs en esta mesa por dos veces más placer. Las asociadas, repletas de experiencia, están en el Delice des Anges, donde se recomienda reservar. Cuando los brochetes de cigalas se casan en el mango asado, que la crujiente de cordero se llena de foie gras, se dice que hay invención en el aire. El foie gras, hablando, es el clásico clásico de la casa. Está disminuyendo en múltiples variaciones, muchas asociaciones audaces y viables. No hay falta de gusto, ni de mamice. Después, es Angelique quien pasa a la acción con sus siete dulces dulces e inventivos, estos miñardit sutiles que los servidores deben tener en cuenta. La elección limitada del mapa vale la frescura de los productos. Además, el entorno rústico, un poco anticuado, es agradable para degustar los vinos del Ducado de Uzès. El establecimiento propone una visita del último horno de cerámica de Saint Quentin.
Je n'ai jamais compris le décalage du descriptif du petit futé...
Et aujourd'hui, après une nouvelle déception en bretagne, je retourne sur le site de ce "restaurant " en me demandant s'il existe toujours...