Cómo llegar y contactar
Restaurante bistronómico con terrazas y cocina del chef Yoann Gérard-Huet, situado en un entorno histórico en Pauillac.
El restaurante bistronómico del Hôtel des Vignes et des Anges ocupa un magnífico edificio histórico con una decoración sobria y elegante. En el comedor, los tonos azules y dorados combinan a la perfección con las mesas de mármol y las sillas de terciopelo. En la cocina, el chef Yoann Gérard-Huet trabaja con productos locales y celebra el terruño con delicadeza. Cuando hace buen tiempo, el comedor se abre a dos terrazas. Una ofrece una magnífica vista del estuario de la Gironda y del puerto deportivo, mientras que la otra ofrece una comida más íntima en el jardín del hotel.
Para más información
Información y horarios en BISTRO DES VIGNES
Logis. Abierto de lunes a viernes para almuerzos y cenas. 7 días a la semana para los huéspedes del hotel. Se recomienda reservar. Menú: aprox. 45 euros. Menú infantil: 15 € (hasta 10 años). Vino por copas. Menús de 17 a 26 euros. Admite grupos. Sillas para bebés. Zona ajardinada. Terraza.
Mensaje del propietario
El restaurante Bistro des Vignes abre 7 días a la semana en temporada alta (de abril a octubre) y de lunes a viernes en temporada baja (de noviembre a marzo). Recibimos a nuestros clientes por la mañana para un desayuno gourmet, al mediodía para el almuerzo, por la tarde para un tentempié o el té de la tarde y por la noche para la cena. Puede cenar en el comedor o en una de nuestras terrazas (con vistas a la ría o al jardín interior). Se recomienda reservar para el almuerzo y la cena. Menú: aprox. 45 euros. Menús del mediodía de 17 a 26 euros. Menú infantil: 15 € (menores de 10 años). Bar de vinos y cócteles abierto los 7 días de la semana. Admite grupos. Sillas de bebé disponibles.
Opiniones de los miembros sobre BISTRO DES VIGNES
mets tous excellents. Félicitations au chef et à toute l'équipe. Nous recommandons vivement cette adresse que nous avions déjà appréciée à plusieurs reprises. Bravo!!!
Le restaurant était vide mais nous sentions déjà le peu de chaleur du lieu à travers des serveurs qui pourraient refaire un petit tour en école de restauration.
Il me semble qu'il y a trop de personnel au service le midi.
La cuisine est recherchée et raffinée, les produits de qualité et surtout d'un excellent rapport qualité prix!
Nous reviendrons pour profiter de la terrasse ensoleillée