Brasserie simple pero efectiva con buenos precios y comida de calidad.
Situado en el corazón del centro de la ciudad, frente a la iglesia, el Chapeau Rouge es una sencilla brasserie, pero con una receta eficaz, ya que el restaurante está siempre lleno. Precios correctos, cocina de calidad, no se necesitó mucho más que eso para que el establecimiento tuviera éxito. Esta es una buena dirección para almorzar en Neufchâtel, durante la pausa del almuerzo, entre dos citas o antes de volver a la carretera. La experiencia culinaria puede no revolucionar su vida, pero los platos suelen ser abundantes, el personal es amable y, lo más importante, el servicio es rápido. Además, el establecimiento tiene la ventaja de estar abierto los lunes y ofrece una buena selección de cervezas de barril.
La tartelette "locale" méritait le déplacement.