LA CAVE RAVONNEAUX

Fue Jacques Ravonneaux quien, en los años 80, se hizo cargo del pequeño negocio de su tío en la cervecería, dejando su trabajo en Solvay. El pequeño almacén escondido detrás de la iglesia se ha metamorfoseado en una vitrina gigante desde 2010 en más de 2.400 ^m2, sin contar las estanterías. Imposible perderse, frente al aeropuerto, a lo largo de la RN 73 entre Tavaux y Dole. La familia Ravonneaux se ha convertido en uno de los mayores especialistas en cerveza francesa. Más de 1.300 referencias en venta! Un impulso que debemos a Janine, la hermana, pero sobre todo a Claude, ambos desaparecieron demasiado pronto. ¡Claude fue apodado "el Papa de la Cerveza"! Los 400 ^m2 de la tienda están divididos en módulos temáticos: cristalería (incluyendo botellas de cerveza), artículos para fiestas, bebidas alcohólicas, bodega de whisky y ron, bodega de vinos. El espacio suelto para el té y el café hace cosquillas en la nariz en cuanto se cruza el umbral. Las noches cobran vida con las degustaciones descubiertas durante el año. La jornada de puertas abiertas en abril es siempre popular tanto entre profesionales como entre particulares.