VERRERIE LA ROCHERE
La fábrica de cristal más antigua de Francia, dirigida por la familia Simon de Thysac, con más de 1.000 modelos.
Una de las visitas más sorprendentes de la región, dedicada a una actividad tan artística como artesanal. La cristalería de La Rochère, fundada en 1475, es la más antigua de Francia que sigue en funcionamiento. Se construyó al borde de un bosque para proporcionar madera a los hornos. La sílice se extraía del suelo de arenisca y la cal de los suelos calcáreos de los Vosgos. De esta alquimia nació el vidrio. Desde que Simon de Thysac, el primer maestro vidriero, se instaló aquí, ha arraigado una larga historia, salpicada por algunas ventanas rotas (la vidriería fue atacada y destruida varias veces en los dos siglos siguientes). Fue comprada en 2021 por Holding TOURRES, que ya poseía una cristalería: Watersperger en Blangy-sur-Bresle, especializada en botellas de lujo. Visitamos los talleres, modernizados a lo largo de los años. El oficio de soplador de vidrio, en cambio, no ha cambiado. Es un oficio que se transmite de generación en generación. En la tienda, encontrará más de 1.000 modelos, desde cristalerías clásicas a creaciones artísticas, pasando por jarrones, lámparas y frascos de perfume, con formas contemporáneas, originales o clásicas. Por último, para completar esta visita ineludible, el Jardín y la Galería Japonesa, sede de numerosos artistas. La Verrerie, con su gran experiencia, ha desarrollado colecciones de vidrio soplado a mano y a máquina, que van desde la recuperación del siglo XVIII a las creaciones de diseño. La Rochère se centra en la convivencia, la gastronomía y la curiosidad para compartir el placer de recibir a través de las generaciones.