EL CONVENTO DE SAN FRANCISCO
Este histórico convento, fundado en 1485, está actualmente abandonado, pero está previsto un programa de restauración.
Conocido como el "convento de Orezza", fue fundado en 1485 por los franciscanos. En desuso durante la Revolución Francesa, recobró su importancia en el siglo XVIII, sobre todo en la lucha de Córcega contra Génova. En el convento se celebraron varias asambleas consultivas. En marzo y abril de 1731, el canónigo Orticoni y los teólogos se reunieron allí para debatir la legitimidad de la revuelta contra Génova. El 20 de abril de 1731, decretan por unanimidad que la causa corsa es "santa y justa". El 30 de enero de 1735, la asamblea de Orezza (Sebastiano Costa, Luigi Giafferi y Giacinto Paoli) proclama la independencia de Córcega. El pueblo corso se pone bajo la protección de la Virgen María y se adopta "Dio Salvi Regina " como himno nacional. El Papa Benedicto XIV envió al franciscano San Leonardo de Porto Maurizio a predicar una misión contra las luchas de sangre que asolaban Córcega. En 1751, se votó una nueva constitución. Jean-Pierre Gaffori fue nombrado General de la Nación y se le confió el poder ejecutivo. En 1790, Pasquale Paoli y Napoleón Bonaparte se reunieron aquí. El convento albergó la gendarmería hasta el derrumbe del tejado en 1934. Durante la Segunda Guerra Mundial, los italianos instalaron aquí un depósito de alimentos y municiones, antes de que fuera bombardeado y casi destruido por los alemanes en 1943. Abandonado a su suerte, el convento se encuentra ahora en un estado lamentable, pero está previsto un programa de restauración.