SYNDICAT AOP OLIU DI CORSICA
En Córcega, donde las prácticas de cultivo y las variedades establecidas desde la Antigüedad son la herencia de una civilización ancestral basada, entre otras cosas, en el cultivo del olivo, el aceite de oliva es un producto identitario por excelencia, procedente en su mayor parte de olivos multiseculares, nunca alterados por las heladas, que a veces alcanzan hasta 20 metros de altura.
Creado en 2002 por un puñado de olivicultores apasionados, comprometidos con la salvaguarda de la tradición olivarera corsa y de este olivar único, el sindicato de la DOP Oliu di Corsica trabaja para promover y defender un aceite de oliva excepcional, producido todavía en pequeñas cantidades en un entorno rico y preservado.
En 2015, los olivicultores de la isla hicieron que se reconociera la especificidad de los diferentes aromas obtenidos según el método de recolección, y hoy, el aceite DOP Oliu di Corsica está disponible en dos gamas: una "más fresca", procedente de la "recolección en el árbol". La otra es más "dulce", producida por la "cosecha a la antigua", por caída natural en redes, con aromas de aceitunas negras, frutos secos o flores del maquis; se adapta especialmente bien a los platos calientes como la carne y el pescado a la parrilla...
Para preservar este patrimonio excepcional, sobre todo de la temida xylella fastidiosa, que está diezmando los olivares italianos, el sindicato de la DOP Oliu di Corsica, que cuenta ya con 176 miembros, ha puesto en marcha la producción local de plantas de olivo de variedad corsa.