BODEGA EL RIOJANO
leer másFundada en 1938, esta bodega presenta una decoración muy bella, con vigas vistas y barriles cuyas tapas pintadas por artistas de paso por el lugar constituyen el curioso Museo Redondo. En la carta combinan recetas tradicionales, como los caracoles a la riojana, con platos más contemporáneos, como los raviolis con salsa bechamel de foie, el cerdo ibérico con salsa chimichurri o el tataki de atún. También hay buenas tapas para compartir, incluyendo las de tortilla, las anchoas de Santoña y las típicas rabas.
BODEGA FUENTE DÉ
leer másUna pequeña y encantadora bodega adorada por los santanderinos por su ambiente familiar y su famoso cocido. El lugar, que conserva su autenticidad, es también muy apreciado por sus platos de quesos y charcutería, para compartir en el bar o alrededor de una de las pequeñas mesas de madera. Pruebe el queso picón, un queso azul (y fuerte) del valle de Liébana. Hay mucha gente los fines de semana: ¡no olvide reservar mesa!
MESÓN EL TROPEZON
leer másEn este pequeño restaurante rústico se sirven recetas montañosas, como las judías rojas al chorizo y el cocer saturados (especie de cascabel). Platos copiosos y consistentes, sin más pretensiones que la de apaciguar los estómagos.
EL CARMEN
leer másCocina tradicional y roborativa en este pequeño restaurante de carretera que compra sus productos entre los ganaderos y los agricultores de la zona. Sin pretensiones, pero eficaz y barata. Las porciones son generosas pero conservan un poco espacio para probar la surtido de quesos de la región.
RESTAURANTE DEL PILAR
leer másEn un entorno muy bello frente al mar, podrá disfrutar de pescado y marisco fresco. El mejor restaurante de Santoña.
LOS CASTAÑOS
leer másUn pequeño flechazo, este restaurante se distingue de otros establecimientos por la calidad de sus platos y del servicio. Recomendamos los menús, siempre generosos, que le permitirán obtener una vista general de su cocina. En verano podrá disfrutar del bar de cócteles y de su terraza, escondida detrás del restaurante. También dispone de una terraza más íntima para cenas románticas.
RESTAURANTE GELE
leer másA un paso de la plaza Pombo, esta es una apuesta segura desde 1964. Ofrecen una cocina tradicional basada en el marisco fresco y las verduras de la zona. En el salón de la planta baja o en la primera planta, más tranquila, se puede disfrutar de un buen menú del día o de raciones para compartir: rabas, mollejas... acompañadas de una buena selección de vinos.
CASA CAYO
leer másPlatos de jamón serrano y quesos de granja (delicioso queso de cabra de Arciñín) para disfrutar en la barra con una jarra de vino tinto y en compañía de los habituales de la zona. El restaurante, reabierto en 2019, ofrece un menú montañés. No se pierda el cocido lebaniego, la especialidad de la casa.
AS DE GUÍA
leer másPequeño restaurante con una decoración bastante estándar pero donde se puede comer muy bien, especialmente deliciosos arroces y revueltos, que son las especialidades de la casa. El menú Tradición permite degustar las típicas anchoas y almejas de Santoña.
RESTAURANTE RONQUILLO
leer másEn la entrada, un típico bar de pueblo frecuentado por personas acostumbradas. Hay que ir a la sala del restaurante para descubrir una bonita decoración rústica y montañosa, con sus paredes de piedra oscura. Se sirve un excelente menú del día, con porciones más que generosas. Las carnes amañadas en salsa son excelentes.
POSADA EL MOLINO DE CADALSO
leer másEsta típica posada, inaugurada en 2014, sirve de hotel y restaurante. Debe su nombre al antiguo molino de agua que funciona desde hace más de 400 años. Podrás degustar platos tradicionales como el cochinillo en horno (cochinillo) o el cordero asado.
SOLANA
leer másEs indiscutiblemente la mejor mesa de la región. El restaurante Solana, premiado por una estrella Michelin, cuenta además con un entorno magnífico en un entorno verde, cerca del santuario del Bien Aparecida. Aquí, el chef Ignacio Solana dirige las cocinas de este establecimiento familiar que se transmite de generación en generación. Pero la modesta taberna de posguerra no tiene mucho que ver con el elegante restaurante de hoy, que propone un auténtico paréntesis gastronómico. Un must en su categoría.
PLAZA RESTAURANTE
leer másContemporáneo e informal en la zona del gastrobar, chic e íntimo en el restaurante. El Plaza mezcla ambientes para satisfacer los deseos de todos. Fiel a este espíritu, la carta ofrece tapas y buenos platos de carne y pescado. Nos gusta el servicio, muy atento, y la animada terraza.
BODEGA LA CONVENIENTE
leer másToda la ciudad se encuentra por la noche en esta antigua bodega con su decoración inalterada desde hace siglos. Bajo techos altos, entre filas de botellas polvorientas y grandes carteles de bebidas alcohólicas, uno se deja seducir rápidamente por la intoxicación ambiental. Ya sea para estar en la zona del bar con una copa de Rioja, o en la gran sala de atrás para compartir unas tapas, ¡este lugar es imprescindible! Pruebe los fritos (de todo tipo), la especialidad de la casa, pero no dude en pedir medias raciones porque las cantidades son realmente generosas. ¡Gran ambiente!
RESTAURANTE CAÑADÍO
leer másCañadío es uno de los mejores restaurantes de la ciudad, conocido en toda la región por su suculento pescado y por otras especialidades regionales preparadas con talento por su chef, Paco Quirós. Si no puede permitirse el lujo de una comida a este precio, disfrute del bar, cuya diversidad de tapas y raciones le hará olvidar rápidamente los manteles del salón de al lado. Tenga cuidado, el éxito tiene consecuencias: si viene en un fin de semana, en mayo o en verano, encontrará la barra completamente atiborrada de gente.
PIZZERIA LA TAHOMA
leer másSencillo y barato.
MESÓN RAMPALAY
leer másEn la esquina de la bonita plaza donde se encuentra la iglesia de Santa Lucía, este clásico mesón puede resultar una agradable parada para compartir un plato de rabas, anchoas a la parrilla o un aperitivo de pinchos en el bar. A la carta, muchas especialidades regionales servidas como raciones. ¡Sabroso y sin pretensiones!