Cadenas hoteleras España

Desde el primer alojamiento construido en la sierra de Gredos en 1928, la red actual de Paradores cuenta con 97 establecimientos repartidos por dieciséis comunidades autónomas y más de cuatro millones de plazas. De todos ellos, dos se encuentran en el País Vasco: el de Argomániz, en Álava-Araba, que ocupa un antiguo palacio renacentista en las inmediaciones de la sierra de Gorbea y de la capital provincial, y el de Hondarribia, que se alza en el que fuera castillo de Carlos V, cuya construcción se inició en el siglo X.

Una central de reserva que propone una selección bastante amplia y completa de buenos alojamientos en la zona.

Lugar de encuentro de los hoteles con encanto rurales o urbanos.

El H10 Tindaya es un hotel de 4 estrellas situado en Costa Calma, Las Palmas. Ofrece acceso directo a la playa de Sotavento, en el océano Atlántico, y está a sólo 10 km del zoológico Oasis Park Fuerteventura. Las habitaciones son luminosas y disponen de conexión Wi-Fi gratuita, TV y balcón. Algunas también ofrecen vistas al océano. Las suites incluyen una sala de estar con sofá cama. Hay servicio de habitaciones. El desayuno y la cena están incluidos en el precio. El hotel cuenta con un restaurante bufé con cocina abierta, un restaurante de estilo retro americano, una cafetería y un bar de cócteles. Hay 5 piscinas al aire libre, incluidas 2 piscinas infantiles, un bar junto a la piscina, gimnasio, spa y campos deportivos. Se organizan espectáculos en directo para entretener a los huéspedes. La conexión Wi-Fi es gratuita en todo el hotel. El aparcamiento también es gratuito. El hotel está adaptado para discapacitados.

Situado en la provincia de Vizcaya, España, el Albergue Andiketxe es una residencia hotelera en Mendata. Ofrece habitaciones confortables y muchas zonas comunes, como una terraza y un comedor, donde los huéspedes pueden relajarse y socializar. Las comidas servidas son apreciadas por los viajeros, aunque algunos han señalado que la cena era un poco ligera para los caminantes y que no había vino servido en la mesa. El horario del desayuno puede ser un poco tardío para los peregrinos, a las 7.30 de la mañana. Las duchas comunes están limpias y son adecuadas. Los anfitriones son amables y serviciales. Los huéspedes también apreciaron la tranquilidad del lugar. Sin embargo, algunos señalaron que la recepción a la llegada era normal y que había que esperar fuera hasta que se abriera la puerta. Además, no era posible comprar una bebida por la tarde. A pesar de estos pocos puntos negativos, el Albergue Andiketxe ofrece una experiencia agradable a los viajeros que buscan un alojamiento acogedor en Mendata.