Los mejores alojamientos Togo

En un pequeño remanso de paz, este pequeño hotel dispone de encantadoras habitaciones con aire acondicionado y una decoración moderna. El baño, la ducha, el inodoro y el lavabo están impecables. Televisión, teléfono y wi-fi. La recepción se abre a un patio arbolado, que sirve de bar, restaurante y pizzería. También hay un hermoso restaurante con aire acondicionado. El hotel es famoso por sus abundantes almuerzos buffet de los martes (europeos) y los jueves (africanos). El menú a la carta ofrece platos locales e internacionales. También buenas pizzas a la leña.

El mítico Sarakawa es el primer hotel de lujo de la capital, y hoy el más antiguo. Sus competidores de alta gama han llegado a destronar a este hotel, tan popular para las estancias de negocios en el pasado. Las 213 habitaciones y los 39 bungalows están envejeciendo, pero algunos de los alojamientos han sido renovados. Sin embargo, sigue siendo imprescindible venir a disfrutar de su hermoso jardín con piscina olímpica, su gimnasio o su restaurante gastronómico europeo. Muy buen Wifi para trabajar. El entorno exterior sigue siendo muy agradable durante el día.

El hotel Alizé dispone de un aparcamiento sombreado, un bonito bar-restaurante, una pequeña y agradable piscina para relajarse, una playa privada, una terraza en la primera planta y una veintena de habitaciones sencillas pero confortables. Algunas de las habitaciones del piso superior tienen una terraza con vistas al mar. En el bar-restaurante podrá disfrutar de una deliciosa cocina local e internacional, elaborada con productos frescos. Los menús cambian cada día para variar los placeres. En definitiva, un lugar tranquilo y relajante, con una buena relación calidad-precio, a pocos pasos del mar.

Este pequeño hotel ofrece una veintena de alojamientos en un entorno rústico, desde habitaciones hasta bungalows y pisos. Los alojamientos están equipados con TV, ducha o bañera, así como con conexión Wi-Fi. Son sencillas, limpias y están decoradas con un cálido estilo africano. El bar-restaurante, situado en torno a un bonito jardín tropical, ofrece un menú variado, que mezcla la cocina africana y la europea. No te pierdas el famoso "poulet bicyclette", una especialidad de la casa. Una pequeña piscina invita a relajarse después de comer.

Uno de los mejores lugares para alojarse en Lomé. El hotel está estratégicamente situado a orillas de la laguna de Bê, cerca del aeropuerto de Lomé y a diez minutos del centro de la ciudad. El restaurante junto a la piscina, bajo una gran cabaña de paja, y el bar Napo Beach, hacen de éste un lugar acogedor que puede ser festivo, ¡sobre todo cuando el jefe, Gaston Napoléon, marca el ritmo! Las habitaciones están limpias, equipadas con mosquiteras y el entorno está arbolado. Es un lugar encantador para alojarse. Se puede organizar un servicio de transporte entre el hotel y el aeropuerto.

Algo alejado de la ciudad, el Hotel Izé ofrece una hermosa vista de la montaña. Las 13 habitaciones, limpias, espaciosas, climatizadas y ventiladas, con suelos de baldosas de color claro, TV y zona de escritorio, están bien presentadas. El hotel tiene un bar en el ala izquierda y un restaurante en la parte de la recepción. Aquí podrá disfrutar de pescado recién capturado a la brasa. Apreciamos el entorno muy relajante del establecimiento, así como la cálida acogida del personal. ¡Una dirección para descubrir!

Este hotel de 27 plantas fue completamente renovado en 2016, convirtiéndose en el más lujoso del país. En la última planta, el hotel cuenta con un sky bar desde el que se puede ver toda la ciudad a través de grandes ventanales. Junto a él, el restaurante gastronómico asiático también ofrece una panorámica de 360° de Lomé. En la^2ª planta, el Akwaba Grill es un lugar muy agradable alrededor de la piscina para disfrutar de parrilladas y pizzas al aire libre... Las habitaciones son de buen nivel y la decoración hace malabares entre lo clásico, el diseño sueco y lo ultra contemporáneo.

En el corazón de la ciudad, el hotel RCL abrió sus puertas en 2013, sumándose con orgullo a la oferta hotelera de Kpalimé, con sus veinte habitaciones modernas y climatizadas. Son limpias, tranquilas y, para algunos, espaciosas, con buena ropa de cama. En cuanto a la cocina, se hace hincapié en las especialidades del país. Entre otros, se puede degustar un sabroso fufu de ñame de Kpalimé. El menú también incluye algunos platos europeos como brochetas y espaguetis. La acogida es profesional y el equipo está atento a las necesidades de los clientes.

Se trata de la nueva generación de alojamientos turísticos de estilo lombardo, 27 habitaciones modernas y confortables, incluidas ocho suites, con amplios baños. Preferimos las habitaciones de la planta superior, más luminosas y menos propensas a la humedad. El lounge bar de diseño acoge a los huéspedes hasta altas horas de la noche, especialmente cada fin de semana, cuando se organizan noches de karaoke. El restaurante del hotel, sorprendentemente pequeño, está ultra diseñado con un ambiente rojo brillante y ofrece un menú exprés muy razonable a la hora de comer y servicio a la carta por la noche.

Situado en el corazón del centro de negocios de Lomé, este hotel ofrece un servicio muy confortable, apreciado por los hombres de negocios. Las habitaciones con aire acondicionado están convenientemente equipadas con wi-fi y televisión por satélite. Los huéspedes tienen a su disposición un restaurante y un bar. Los huéspedes pueden disfrutar de platos clásicos y especialidades locales. El servicio está a la altura del confort de las habitaciones. No hay piscina en este hotel, pero los precios son negociables cuando te quedas varios días. La recepción está especialmente cuidada y es agradable.

El hotel ofrece 78 cómodas habitaciones y suites con aire acondicionado. Las Suites y Privileges, equipadas con bañera, son encantadoras. Las que tienen vistas al mar o a la piscina son las más atractivas. El vestíbulo es un lugar agradable para relajarse, con un bar. El restaurante sirve especialidades africanas y europeas elaboradas por experimentados chefs. En el exterior, las tumbonas bordean la piscina y, más allá, una hermosa playa privada invita a tomar el sol. Gimnasio, salas de conferencias y traslado gratuito al aeropuerto.

Bonito entorno: playa y cocoteros, ¡un pequeño paraíso en un barrio popular! Los bungalows, limpios y cómodos, llevan los nombres de las principales ciudades togolesas: Dapaong, Baguida, Kara... Las habitaciones con vistas al mar son las más bonitas. Junto a la playa, encontrará el restaurante Gastronomia, la piscina y tumbonas para un bronceado impecable. El lugar también es estupendo al atardecer, con un cóctel en la mano. El personal le recibirá con una cálida sonrisa y cuidará de usted durante toda su estancia.

Idealmente situado a 500 metros del mar, el Hotel Le Pélican ofrece una cálida bienvenida en un entorno completamente renovado. El hotel dispone de 60 habitaciones con aire acondicionado, con una decoración minimalista y cada una de ellas con baño individual con ducha. También hay salas de reuniones y conferencias. Desde el exterior, es difícil imaginar que el hotel tiene una zona verde y una piscina en el corazón del jardín, flanqueada por un pequeño y agradable restaurante. Bonito vestíbulo con aire acondicionado.

El hotel tiene una buena ubicación en el centro de la ciudad y cerca de la playa. Es bastante tranquilo y las habitaciones con aire acondicionado ofrecen suficiente comodidad. El hangar sirve de restaurante y ofrece platos como elatiéké de pescado, un plato de ensalada y brochetas de carne o pescado. Puede sentarse frente a la recepción y observar la vida en el bulevar. El personal es amable y atento con los clientes. Una dirección agradable.

Este gran edificio azul, blanco y rojo se ha convertido en un punto de referencia para los conductores y los empresarios. Inaugurado en 2017, este hotel de 3 estrellas ofrece 40 habitaciones climatizadas y confortables, repartidas en varias plantas. Puede elegir entre cuatro tipos de habitaciones: desde la más pequeña hasta la más lujosa, con o sin balcón. Algunos incluso tienen vistas al mar. Tres restaurantes le dan la bienvenida, uno de los cuales se encuentra en la terraza del sexto piso, con una hermosa vista de la ciudad. Cocina africana o europea, ¡la elección es suya!

Se entra por el bar, situado en un agradable jardín, que también sirve de recepción. Las 22 habitaciones con aire acondicionado están divididas en dos edificios, uno de los cuales tiene una terraza con vistas al mar. Son limpias y cómodas, con un televisor de pantalla plana, un escritorio y un armario. Algunos son más pequeños, mientras que otros tienen una hermosa vista de la playa. Las habitaciones más caras tienen una cama king-size, un baño más grande y un pequeño salón. La recepción es amable y agradable.

El Madiba ofrece un entorno tranquilo y relajante frente al mar con acceso directo a la playa. Cuenta con 23 habitaciones y suites con aire acondicionado, algunas de las cuales tienen una hermosa vista del océano. Algunas de las habitaciones dobles son bastante pequeñas pero tienen balcón, escritorio y televisión de pantalla plana. Para más espacio, y si su presupuesto se lo permite, prefiera las suites o los bungalows, que le asegurarán un bienestar total. Además de la playa, podrá relajarse en la hermosa piscina con un cóctel en la mano. Buena bienvenida.

Un hotel básico, situado a unos 10 minutos del aeropuerto y de la playa. Las habitaciones tienen un pequeño escritorio con aire acondicionado, un pequeño baño y una televisión. Las habitaciones de la^primera planta son preferibles a las de la planta baja, ya que son menos ruidosas. La recepción es amable y el personal es atento con los huéspedes. Wi-fi disponible pero no muy estable (como en muchos hoteles de Lomé). El establecimiento cuenta con un restaurante que ofrece especialidades africanas y europeas, elaboradas con productos frescos. También un bar y dos salas de conferencias.

Situada cerca del nuevo palacio de justicia, esta casa de huéspedes de la señora Yvonne está acondicionada con mucho refinamiento. Las cinco habitaciones (Orquídea, Hibiscus, Máscaras, Retrato y Bogolan), equipadas con mosquiteras, están decoradas con materiales locales. Podrá disfrutar de una deliciosa comida en uno de sus hermosos jardines de vegetación local, o en la mesa familiar, según convenga para debatir el país y sus riquezas. Una casa acogedora.

El hotel está situado en la meseta de Danyi, no lejos del monasterio de las hermanas benedictinas. El clima aquí es templado y los alrededores muy vírgenes. Desde el hotel se puede ver el verde valle con una pequeña cascada debajo. Las habitaciones están bien cuidadas y sus baños son de piedra de Kpalimé. Algunos tienen una terraza privada con vistas al jardín. Como el propietario es paisajista, la finca también está bien cuidada. Un ambiente agradable reina en este hotel, que ofrece un restaurante apreciado bajo su cabaña de paja.