Sitios arqueológicos artesanales científicos y técnicos para visitar Svealand

Aquí podrá conseguir una copia del famoso caballo de Dalarna, hecha a mano según la más pura tradición. No hay nada más auténtico que esto. Si quiere hacer el original, no hay problema, porque puede encargar caballos de madera de cualquier color, ¡directamente desde el sitio web! Así, tendrá donde elegir para complacerse a sí mismo y a sus amigos. Una buena noticia: ¡es más barato comprar su caballo en Nusnäs que en una tienda u oficina de turismo!

El pueblo es un símbolo de la historia de la industria y el comercio del país. Una experiencia kitsch para algunos, emocionante para otros, el pueblo consta de casas hechas totalmente a mano a la manera vikinga. De adobe, paja y madera. Vestidos con trajes de época, los habitantes se afanan en el astillero, tallan el arco del último drakkar o tejen zapatos de cuero, curten pieles y afilan flechas. Los niños pueden disfrazarse.

Al llegar, uno queda inmediatamente impresionado por el gigantesco agujero causado por un desprendimiento en 1687, que se puede apreciar mejor desde un pequeño observatorio situado frente al museo. Esta mina de cobre es una de las mayores de Europa. Hoy en día se puede visitar, ya que su actividad se interrumpió en 1992. Se proporcionan cascos y monos, y el largo descenso le lleva a enormes salas excavadas a mano, luego con máquinas durante siglos, y a lo largo de galerías y canaletas que se extienden a lo largo de 80 km

A cinco kilómetros al este de Västerås, este lugar único -y gratuito- atrae a miles de turistas cada año. De hecho, es el mayor túmulo funerario de Suecia, un vestigio de este cruce de caminos durante el periodo vikingo y un lugar por el que pasaba el rey tras su coronación en la Edad Media. El lugar se caracteriza por una larga hilera de piedras en pie y contiene una de las piedras rúnicas más notables del país. No hay que perdérselo, ni en invierno ni en verano. Información en la oficina de turismo.

Descubierta en el siglo ^XV, esta mina de plata se explotó hasta 1908: ¡cinco siglos de actividad! Actualmente es propiedad de la ciudad de Sala y constituye una atracción muy popular en la región. Se ofrecen varias visitas guiadas: una a 60 metros bajo tierra, otra a 150 metros y una visita combinada. Descubrirá impresionantes cámaras subterráneas, lagos y arroyos como un minero de la época