Restaurantes cocina del mundo Istrie

La cena en la casa del pescador Roman Matika está pautada durante la temporada de verano por el museo de barcos Batana. En el dialecto de Rovinj, Spaccio o spàcio significa konoba (taberna), donde se almacenaba el vino en sus sótanos, y que eran lugares de socialización. En la cocina del pescador se bebía y se comía juntos, y luego se cantaba o se jugaba a las cartas. Hoy en día, el lugar es una atracción turística, con grandes mesas para grupos y un ambiente de banquete, acompañado de canciones marineras (Marco Garbin Cultural Art Society).

No es fácil encontrar un buen restaurante en la calle más turística de Pula Aquí, la terraza ya es una ventaja. Bordeada por un parque, ofrece el placer de cenar con una vista despejada del verdor mediterráneo. En el plato, cocina típica del sur: tabla de embutidos/quesos locales, ensalada de rúcula/aceitunas, pizzas, calamares fritos, carne a la parrilla o ćevapčići, pescado (excelente atún semicocido) o verduras del sur, risotto de tinta de calamar, pasta en salsa. Vinos regionales por copas.

Hablamos de un restaurante-pizzería-asador, y no de un simple bistró. El establecimiento, dirigido desde 1994 por una familia de Poreč, está bien situado en las inmediaciones del parque Juraj Dobrile y de la basílica Eufrasiana. Es fácil reconocer el edificio bicentenario que lo alberga, donde podrá disfrutar de una bebida y una comida tranquila en su soleada terraza. El menú incluye marisco, langosta y pescado a la parrilla, así como pasta fresca con salsa de trufa, risotto, pizzas, ensaladas completas y carne a la parrilla.

Con su espléndida vista y terraza con vistas al mar y a la isla de Cres, el restaurante Carnaro está bien situado. En la temporada alta de turismo, es mejor hacer una reserva si quiere estar bien situado. Abierto todo el día, es muy popular para la comida y aún más para la cena. En el menú, encontramos especialidades de Istria, de tierra y de mar, platos de pescado y carne, a la parrilla o en salsa, a menudo condimentados con ese famoso aceite aromatizado con trufa, pasta fresca, ñoquis, risotto, acompañados de una amplia selección de vinos regionales.

Inaugurado en 2023 en un edificio clásico en la esquina de las calles Flanatička y Sergijevaca, el restaurante ha colocado sus mesas a los pies del Arco de Sergio, en un elegante comedor o en el balcón con una impresionante vista del antiguo monumento. En el menú: el Istrian street food & wine bar, con vino por copas, bruschetta con embutidos y queso, hamburguesa y patatas fritas y bollería durante todo el día. Las opciones más elaboradas incluyen pasta fresca con salsa blanca y virutas de trufa, o filete de atún con semillas de sésamo sobre un lecho de ensalada de rúcula.

Este restaurante turístico del puerto dispone de una hermosa terraza en el muelle. Sirve cocina marinera con especialidades de la región. La carta cuenta con una selección de pescados, bandejas de mariscos, medio o bogavante entero al kilo acompañado de blitva (puré de acelgas y patatas), verduras del sur, pasta fresca, espaguetis, calamares en salsa, risotto del mar con mariscos, mejillones fritos, pizzas y carnes a la parrilla.

En este restaurante familiar, las recetas tradicionales de la zona tienen sabor italiano. Una buena opción de cocina marinera: pasta fresca con langosta y salsa de tomate, sepia cocida a fuego lento en buzzara (una salsa tradicional dálmata hecha con vino blanco, ajo y perejil), cazuela de mejillones, calamares y otros mariscos… Por lo que respecta a la cocina de interior, ofrece un plato de carnes mixtas a la parrilla cocinadas en cazuela de barro, acompañadas de patatas salteadas (plato que se comparte por encargo). Tiene una hermosa terraza cubierta.

Un B&B que encontrará a 5 km de Poreč, en el bosque, a 800 m de la carretera. Se aprecia por sus cómodas y rústicas habitaciones y su restaurante local, con grandes mesas y bancos de madera en el parque. Este ambiente campestre está reservado a los que viajan en coche. En el menú, raviolis con trufas o crema de espárragos trigueros, jamón serrano y queso de cabra, carnes a la brasa y pasta fresca.

Un restaurante en la carretera que conduce a los campings y a las zonas costeras de Stoja. Gina, el cocinero, trabaja aquí desde hace sesenta años. Construido en 1867 frente a la bahía, el restaurante recuerda a una elegante konoba (taberna). En la cocina, ofrecen principalmente mariscos, bandejas de mariscos, parrilladas, ñoquis y pasta fresca en salsa, risotto, etc. Es a la vez tradicional y moderno... La especialidad de la casa es el helado de lavanda cubierto de mermelada. El pan se hace en el momento y la bodega está bien surtida de vinos locales.

Una propiedad agrícola perteneciente a una gran familia italiana. Los herederos han renovado con gusto estudios y pisos confortables con capacidad de 2 a 6 personas. Los productos de la granja nutren las recetas del chef: pan casero para la bandeja de prosciutto con queso, conejo de granja, pasta fresca, espárragos silvestres, trufas blancas de temporada, etc. Apreciamos el entorno y la historia del lugar, la tranquila terraza y la cálida acogida. Degustación y venta de vinos locales.

Este restaurante está un poco escondido. Cuando entras en él, te quedas fascinado por el ambiente: los edificios tienen estilo, hay una bonita bodega con una vinoteca, el entorno es agradable, la mesa bien puesta y el servicio es perfecto y los platos deliciosos. La vinoteca ofrece 700 vinos croatas diferentes.

Un auténtico perla del Adriático, es un restaurante con un ambiente romántico que propone una cocina mediterránea de Istria a medida y de un nivel local. La bodega alberga botellas de todo el mundo, pero también las mejores botellas de productores locales. Sin sorpresa, los mejores champanes franceses tienen un bonito lugar igual que los puros cubanos.

Este restaurante, adosado a la calle del mismo nombre y al establecimiento adyacente, es un bed and breakfast, con su original decoración, ofrece especialidades típicas de Istria. El menú demuestra una preferencia por la cocina de pescadores con mariscos a precios razonables. Los platos son sencillos pero sabrosos, con pescado a la parrilla servido entero en el plato, acompañado de verduras del sur o de la indispensable blitva, un puré de patatas y brotes verdes, cocidos al vapor y rociados con aceite de oliva. ¡Muy digerible!