EL CABALLO DE LAS LOMAS
leer másEste restaurante propone una buena cocina del mercado en un entorno bastante lujoso, dentro del hotel Las Lomas.
LAS BARANDAS
leer másSituado en la Plaza de España, este restaurante totalmente blanco, de paredes en el bar, es muy parecido al de la blancura de la ciudad. Y no será su única manera de rendirle homenaje porque podrás degustar los grandes clásicos como los aceites locales o el jamón ibérico, certificado DO de la dehesa de Extremadura, un gusto por el mantenimiento de las tradiciones locales que Manolo, el jefe del restaurante, ha transmitido a estos hijos Manuel y Fernando, que trabajan con él. Déjate probar por el carpaccio de jamón, acompañado de quesos y láminas de foie gras, los chipirones de Badajoz (garnis de chorizo) o por el ragú de cordero al chile de Vera. Si optas por un solomillo (red) en corteza, te pedirás inscribir una nota sobre la corteza antes de la cocción, según la tradición casera. En postre, podrás elegir entre la tradición local, el pasquete de hojaldre o deliciosos sorbetes o un queso fresco, acompañado de membrillo (pasta de coing) y nueces. Para disfrutar de las papilas y los ojos, el comedor permite ver la iglesia Nuestra Señora de Los Ángeles. También hay una terraza y una zona de bar con tapeo.
BAR EL RECLAMO
leer másComo está abierto desde el potrón-minet hasta tarde por la noche, quizás sea tu cantina. Para probar una gran variedad de tapas (jamón, chorizo…), detrás de la barra, o degustar la cocina estremecida, de la que es especialista. Con el menú, la canfaina (guiso de cerdo) o el guarrito (brocheta de cerdo asado, servida con patatas), se impone la etapa gustativa.
ASADOR VÍA DE LA PLATA
leer másEs el restaurante del albergue. En un espacio a las bóvedas blancas blancas, te servirás a los buenos clásicos del lugar: bacalao o cerdo en el horno, solomillo, paletilla de cabrito (costillas de agua) y profusión ibérica. Un entorno muy bonito y un precio hiper atractivo lo convierten en un lugar muy recomendable.
TABULA CALDA
leer másAl entrar, encontrará un restaurante tradicional, alojado en una antigua casa, decorado con acentos andaluces, con profusión de cerámica y salpicado de rosetas que muestran los dioses de la mitología romana. Aquí podrá disfrutar de los platos típicos de la región, especialmente las famosas migas y los platos de jamón ibérico. También podrá degustar las verduras y frutas de la huerta, expuestas a la entrada del restaurante, y que dan fe de su compromiso con un mercado local. Porciones generosas y una cálida bienvenida.