Le seducirá en cuanto vea el edificio que alberga esta crepería: piedras viejas, una pequeña puerta de entrada azul y ventanas decoradas con cortinas hechas con ganchos. En el interior, una antigua chimenea, un techo bajo, un armario de porcelana lleno de viejas placas bretonas y una escalera de piedra. Esta antigua casa de los maestros náuticos, que data del siglo XVII, ofrece una decoración típicamente bretona. La bienvenida es cálida y los panqueques ligeros y deliciosos. Usted se sentirá tentado a tomar varias y se verá mimado para la elección, ya que la tarjeta se proporciona. Los panqueques"especiales" atraerán su atención: hechos con tártaro de algas marinas, saludan la proximidad del mar. Esta pequeña crepería es ideal para un momento familiar. Nota: una segunda habitación, más moderna, puede alojar a grupos (a petición).
Le serveur était très gentil et la nourriture excellente. Dédicace à la crêpe From'algues. Je reviendrai !
Crêpes Super bonne,le personnel est Super cool