CREPERIE – BRASSERIE LE TRIBORD
Todo aquí evoca el mar y los marineros, el recreo y la pesca empezando por el bar, con un ½ casco de un antiguo barco de pesca o los tres buey que dejan entrar la luz en la pequeña sala abuhardilla de la primera planta. La madera que luce, las piedras y los cordajes bañados en un buen olor de mantequilla, el autóctono como el visitante de paso aprecian. Los crepes son exquisitos, los forros trabajados, finos y sabrosas, cada ingrediente encuentra su justo lugar en el sutil juego del matrimonio de los sabores. Y con nada menos que 90 propuestas de crepes, hay materia que debe tomarse aquí. En temporada alta se come ostras y todo el año, ensaladas compuestas, tortillas, mejillones y carnes, tartare de ternera, por ejemplo. Las vistas al mar son de la de la que no se cansa, sobre todo desde la terraza sobre el llover o la planta. Muy bien.
La pâte excellente et la garniture très bonne. A l’heure où j’écris ce commentaire tout se passe bien pour nous.
Nous avons pu en discuter avec d’autres clients qui avaient vu le commentaire précédent et avons bien rire car on pense que ce Mr doit être fragile et ne pas apprécier une vraie crêpe bretonne et devrait arrêter de regarder CAUCHEMAR EN CUISINE pour ce permettre de critiquer pour savoir si la cuisine mérite un contrôle d’hygiène.