ISE-JINGU
Cómo llegar y contactar
Es una visita única en la vida. Considerado el santuario más sagrado de Japón, y por tanto el más importante de la religión sintoísta, Ise-jingū, oficialmente llamado jingū, comprende 125 santuarios repartidos en dos partes: Naiku, dedicado a Amaterasu-Omikami, y Geku, dedicado a Toyouke-no-Omikami. Este lugar de gran espiritualidad, que data del siglo III, es una visita obligada en cualquier viaje a la prefectura. Cada año, la gente reza aquí por la prosperidad de la familia imperial, la paz en el país y cosechas abundantes, durante numerosos rituales y ceremonias. El santuario es tan valioso que sus edificios se reconstruyen literalmente, según la tradición, cada 20 años. Los edificios se reconstruyen de forma idéntica, a pocos metros de distancia, utilizando técnicas ancestrales. Incluso hoy en día, los artesanos, que no utilizan clavos, levantan los nuevos edificios utilizando únicamente espigas de madera y entrelazando las distintas partes. Una vez terminada la reconstrucción, la deidad es trasladada a su nuevo lugar de culto en la ceremonia ritual Shikinen Sengu. La madera del antiguo santuario se utiliza después para reconstruir el enorme torii de la entrada y para ayudar a renovar otros lugares sagrados de todo el país. Como Ise-jingū es tan especial, la mayoría de sus edificios están ocultos tras empalizadas y la entrada a la zona sagrada está prohibida al público. Esto aumenta la mística de visitar este tesoro nacional.
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Opiniones de los miembros sobre ISE-JINGU
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