2024

CHU DÔNG TUS TEMPLOS

Monumentos a visitar

Chu Dông Tu, pobre pescador, huérfano, se bañaba, desnudo, en el río Rojo. Como en los cuentos, conoció a la princesa Tiên Dung, hija del 18 º rey Hung, que, de paso en este lugar, tuvo la buena idea de refrescarse en traje de Eve. Golpe de rayo inmediato. Las bodas se celebraron en el campo y en el río. Cólera del rey ante esta locura. La pareja está obligada al exilio. Durante sus tributaciones, Chu Dông te encuentras con un bonze y la luz perfecta. En viático, el bonze Phât Quang (Luz del Buda) le confía un palo y un sombrero de hojas de latania. Encuentra a la princesa, con la que se compromete en una nueva vida empeñada en descubrir la Vía. Una vida dura, donde cada día es una conquista, sobre todo en la hora del billac, cuando los elementos están desatados, y ningún techo alberga a los investigadores de la Verdad. Queda el sombrero, que, plantado en el palo, ofrece un refugio precario bajo la lluvia. ¡Milagro de la fe! La pareja está en un alba radiante, en el corazón de un palacio de jade y esmeralda, rodeado de servidores y soldados apresurados. La noticia llega al tribunal del rey Hung, quien, creyendo en un intento de rebelión, deprisa a su ejército en el lugar. Y el palacio de jade está en una nube de tormenta, con Chu Dông Tu y la princesa. Sólo se encuentra un inmenso terreno arenoso y cargado de agua al que se le dio el nombre de "Marais de una noche". Allí se construyó el templo de Da Hoa, donde hoy se celebra el culto al genio Chu Dông Tu y a la princesa Tiên Dung. El culto es muy popular: los peregrinos vienen de toda la región para intentar obtener suerte, éxito, éxito y felicidad conyugal. Del 10 al 13 º día del primer mes lunar, la población célebre Chu Dông Tu y la princesa a través de numerosas fiestas que alcanzan su apogeo en una magnífica procesión náutica.

leer más