AMOUR, MARACAS & SALAMI
leer másAntoine Pichault y su pareja se han hecho cargo del restaurante que fundaron sus padres hace más de 35 años. En esta casa hecha de recovecos y amueblada con estilo de segunda mano se respira el instinto artístico de la pareja. Él está en los fogones, ella en el comedor, y es en un ambiente acogedor donde sirven platos que mantienen el calor porque están cocinados a fuego lento con amor: berenjenas rellenas, albóndigas a la griega o zuppa para veganos, nadie es olvidado en la corta carta de este café-resto. Los viernes hay café-concierto, sin olvidar las exposiciones.
LA CUISINE DE YANNICK
leer másYannick es lo que llamamos un salsero tradicional. Cuando se trata de caza, hace su caldo con los huesos triturados y liga sus salsas con sangre: el resultado es sencillamente divino. La cocina que se sirve aquí es verdaderamente tradicional y local, con sabor franco-belga. Como la liebre a la royale, que requiere una preparación tan tediosa que ha desaparecido de la mayoría de las cartas de los restaurantes. Forma parte de nuestro patrimonio hasta tal punto que podría calificarse de cocina "de museo". Pero Yannick también adapta su menú al mercado y a las estaciones.
YAKA AFROTORIA
leer másAris Kumeso Mateta y su hermana Pricilla pusieron en marcha esta trattoria donde se dan cita los sabores del África subsahariana. El comedor dista mucho del tópico restaurante étnico. Es una antigua farmacia de la Belle Époque, con todo el encanto de la época y algunos toques de decoración africana aquí y allá: máscaras, telas, etc. En el plato, alitas de pollo, kamundele congoleño, pollo yassa senegalés, mafé de ternera con salsa moambe... en raciones generosas. Un festival de sabores Rincón de comestibles.
AU CÈDRE
leer másA dos pasos de la estación de Lieja-Guillemins, este pequeño restaurante sirve especialidades libanesas en una pequeña sala con pocas mesas. Sobre todo, es el lugar ideal para pedir comida para llevar antes de coger el tren Todos los platos son caseros y están para chuparse los dedos La carta incluye mezzés tradicionales, con una amplia gama de opciones vegetarianas, así como platos, sándwiches y parrilladas. Los menús son muy copiosos, así que tenga cuidado de no morder más de lo que puede masticar