Diversión y salidas Amberes

Entre los estrenos actuales y los clásicos del cine, los Lumière marcan la gran diferencia. Es un pequeño cine que tiene la particularidad de estar alojado en el Museo de la Fotografía. Aquí se puede sentir la pasión por el cine, lejos de los grandes complejos impersonales. Sus dos teatros vestidos de rojo son muy cómodos y las instalaciones de sonido son especialmente eficaces. Aquí no hay palomitas ni nachos (pero sí bebidas servidas en vasos, por favor), estamos aquí por el placer del cine. Las películas son en V.O. con subtítulos en holandés.

Como si de una cafetería neoyorquina se tratara, este moderno bar de café espresso ofrece una gama de cafés cuidadosamente seleccionados procedentes de todo el mundo (Etiopía, Costa Rica, Brasil, Colombia...). La joven y apasionada pareja que regenta el local decidió trabajar con un tostador artesanal cercano para tostar los granos de café seleccionados. Situado justo detrás de la Grand Place, es un placer tomarse un respiro aquí. También bocadillos con panes artesanos, tartas caseras y desayunos.

Un micro-bar como un pedacito de Argentina, con el mismo buen humor latino y una fachada bonita y colorida. El interior es diminuto: unos taburetes, una estantería con productos importados, sobre todo mate. Te apretujas junto a tus vecinos para compartir unas empanadas y cervezas Quilmes, que por la noche fluyen libremente, al igual que los cócteles. Es una buena manera de estrechar lazos. Pero es en verano cuando el bar cobra vida, la terraza se extiende sobre la acera y el sonido exterior transforma la calle en una improvisada fiesta al aire libre.

Ya son unos cuantos años para este "lugar de la cerveza" que, como su nombre indica, está dedicado a la cerveza. Con 333 cervezas embotelladas y 33 de barril, Bier Central es uno de los mejores del país. Es difícil elegir, ¡y puede que tenga que hacer varias rondas! Pero además de 366 cervezas (una para cada día del año), ofrecen platos típicos de la cocina belga, como mejillones con patatas fritas servidos con una cerveza local, carbonnade a la flamenca con cerveza, croquetas caseras de gambas..

En unos antiguos almacenes, a pocos minutos a pie del MAS, encontrarás un oasis junto al agua, el Sommar, uno de los muchos zomerbars de Amberes y uno de los que más éxito ha tenido con su toque chic. El espacio es enorme, con vistas al Escalda y a las grúas de las antiguas instalaciones portuarias. A un lado está el restaurante (diferentes restauradores entran y salen durante el verano) y al otro un animado megabar. Puedes relajarte en un sofá o una tumbona y brindar por la puesta de sol, luego bailar hasta la hora de cierre... y seguir en otro sitio.

Un largo mostrador, una iluminación tenue, estanterías repletas de licores y otros brebajes, y una zona trasera con profundos sofás: así es Dogma, un bar de cócteles situado en el centro de la ciudad. El local tiene algo de bar clandestino, pero no se esconde. Las creaciones del bar, dirigido por el galardonado mixólogo Didier Van den Broeck, cambian cada temporada, pero son sorprendentes (como el Aix-en-Provence con... queso de cabra). Déjese guiar por el personal o por la descripción (afrutado, tiki, largo...) y ¡disfrute!

Club de electro-techno-house por excelencia, referenciado por Resident Advisor, el club se encuentra en el sótano y tiene un aire más bien berlinés, ya que está ambientado en la decoración industrial de los muelles del puerto. Los pesados graves pueden resonar hasta la madrugada sin molestar a los vecinos. Hay un gran cartel de actuaciones por sellos, con muchos invitados de Berlín, Londres y París... Es un local verdaderamente underground. No olvide reservar sus entradas cuando estén programados los productores en directo, ya que el aforo de 400 personas puede agotarse. Dirigido más bien a los conocedores de las noches electro.

Este bar multicultural siempre está animado con música soul, groove y afro. Se celebran conciertos con regularidad, y el local está muy concurrido y es bastante moderno, divertido y cool. Algunas noches están dedicadas a DJ sets de neo-soul, r'n'b, hip-hop, funk y house, mientras que otras se dedican a los ritmos africanos del momento (rumba congoleña, kizomba, bongo flava, coupé-décalé...), ¡para bailar toda la noche! Y no es raro que la fiesta se prolongue hasta el amanecer. También se ofrecen excelentes cócteles.

¡Bienvenido a la playa, versión Amberes! Ideal para tomar un cóctel al atardecer o pasar el rato mientras un DJ pone sus discos de día y de noche. En el exterior: sofás, tumbonas, pufs y sombrillas se extienden en un muelle, sobre la arena, bajo las palmeras, frente a las grúas industriales del puerto. En este amplio y antiguo almacén, los muebles de madera y las plantas suavizan el hormigón en un ambiente "exótico-indú". Hay una pista de baile de salsa, dos restaurantes (Pampelonne y Lambik) y Gusto (tapas mediterráneas)..

Es la mejor sala de conciertos de la ciudad y, aunque no es muy grande, brilla por la calidad de su programación. Aquí actúan cabezas de cartel belgas, europeos e incluso internacionales, incluyendo pop-rock, hip hop, músicas del mundo, blues, folk, indie, jazz, swing y reggae/dub.... No dude en echar un vistazo a la programación durante su estancia, seguro que encuentra un concierto a su gusto. También se organizan espectáculos (música y cine) y actos culturales..

Aunque no entiendas neerlandés, ¡la música es universal! La Opéra Ballet Vlaanderen nació de la fusión entre la Ópera de Amberes y la Ópera de Gante en 1981. Además de óperas, ofrece ballets, conciertos de música de cámara... en definitiva, todo lo clásico. El majestuoso edificio neobarroco de Amberes data de 1907 y tiene capacidad para casi 1.000 espectadores. Está situado cerca de los bulevares Leien. La reputación de la Ópera y la calidad de sus representaciones están bien consolidadas, y las entradas se agotan con meses de antelación. No olvide reservar.