EL DESFILADERO DEL PUENTE DEL DIABLO
Un impresionante espectáculo natural en Alta Saboya, clasificado como Patrimonio Nacional por el Geoparque de Chablais
Las gargantas del Pont du Diable han sido declaradas patrimonio nacional por el Geoparque del Chablais y son uno de los lugares imprescindibles de la Alta Saboya. Una curiosidad natural con unas vistas impresionantes, comienza atravesando un bosque de hayas para llegar a la entrada de las gargantas 70 m y unos pasos más abajo. Un impresionante desfiladero, en parte subterráneo, excavado por el Dranse de Morzine, que puede recorrerse mediante rampas o escaleras ancladas en la roca. El Dranse fluye 50 m bajo nuestros pies en el fondo de un auténtico abismo... ¡Un espectáculo sobrecogedor! La fuerza de los remolinos del torrente ha creado una obra de arte con magníficos colores, formas esculpidas y gigantescos baches. El punto culminante del espectáculo es el Pont du Diable (Puente del Diablo): tras un enorme corrimiento de tierras que bloqueó el lugar, una imponente roca se estabilizó a más de 30 m por encima del torrente, creando una especie de arco. Un consejo del Futé: una visita hacia las 10 de la mañana es la más espectacular, con los rayos del sol magnificando y haciendo brillar todos los colores del desfiladero. Perfectamente cuidados y seguros, el lugar y sus alrededores ofrecen un espectáculo al aire libre en las mejores condiciones. El "Pas du Diable" (Paso del Diablo) es una auténtica obra maestra de cristal que le hará vibrar de emoción Tienda de recuerdos y productos locales de calidad Consejo: utilice el código QR para descargar un texto traducido a varios idiomas de la página web de las gargantas.
¿Lo sabías? Esta reseña ha sido escrita por nuestros autores profesionales.
Los puntos fuertes de este establecimiento:
Opiniones de los miembros sobre EL DESFILADERO DEL PUENTE DEL DIABLO
Las calificaciones y reseñas a continuación reflejan las opiniones subjetivas de los miembros y no la opinión de The Little Witty.

Beaucoup de marche à descendre mais ça vaut le coup d’œil.
Le personnel est très agréable, ils vous accueillent avec le sourire et Thomas le guide connaît sont sujet et sait attirer votre attention.
Au plaisir de vous revoir et belles vacances.
le propriétaire fait une petite explication a l'achat des billets ensuite un petit film avant l'entrée des gorges
A ne pas louper